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En octubre, el índice subió 0,6 puntos porcentuales frente a septiembre y 16,8 puntos frente al mismo periodo del año anterior
Como resultado de la reactivación económica, el Índice de Confianza Empresarial realizado por el Dane, aumentó 0,6 puntos porcentuales, llegando a 63,7% en octubre, lo que significa un máximo histórico desde la creación del indicador.
Comparado con el mismo periodo del año anterior, el indicador incrementó 16,8 puntos porcentuales, cuando se ubicó en 46,9%.
Los sectores que registraron un mayor nivel de confianza empresarial fueron servicios, industria manufacturera y comercio, que presentaron valores de 64,8&, 64,1% y 63,3, respectivamente.
Adicional a este punto, 95,8% de las empresas de comercio, Industria manufacturera, servicios y construcción encuestadas por la entidad, manifestaron tener una operación en condiciones normales durante todo septiembre.
Asimismo, en cuanto al recorte de trabajadores y horas laboradas, solo 7,1% manifestaron dicha reducción, lo que es equivalente a una disminución de 6,4 puntos con base en los empleos recuperados.
Respecto a los resultados, el director de Dane, Juan Daniel Oviedo, afirmó que entre octubre de 2020 y octubre de 2021, el umbral de los 50 puntos fue superado, lo que “nos permite pasar del pesimismo al optimismo en donde el resultado del Indicador de Confianza Empresarial con 63,7 puntos sigue marcando secuencialmente un máximo en total la serie que hemos oficializado desde junio de 2020”, específico.
Para el profesor de la facultad de Economía de la Universidad Externado de Colombia, Isidro Hernández, este índice recoge lo que ha sucedido en la economía durante lo corrido del año en términos de la reactivación.
“Después de las jornadas del paro nacional, el proceso de reactivación económica retomó su senda, lo que sustenta los resultados presentados por el Dane”, dijo el docente.
Sin embargo, el problema en el corto plazo, de acuerdo con el experto, radica en el crecimiento de los precios y la inflación, ya que al estar por encima de la meta establecida por el Banco de la República, puede empezar a frenar la economía y a afectar las expectativas.
“Es posible que ese nivel de inflación empiece a deteriorar ingresos que dé como resultado una reducción de la demanda”, agregó Hernández.
El decano de la facultad de Economía de la Universidad del Rosario, Carlos Sepúlveda, coincidió en que esta noticia va en línea con el proceso de reactivación económica que, a su criterio, se ha reforzado con el esfuerzo en disminuir el nivel de contagios, a menos de que se produzca un cuarto pico.
“A menos de que haya un cambio drástico en el patrón de contagios, vemos una tendencia estable que mantendría el nivel de confianza en niveles similares para noviembre”, apuntó.
Por su parte, el docente e investigador de la facultad de Economía de la Universidad de los Andes, Francisco Azuero, explicó que el ascenso es consecuencia del cambio de las expectativas de crecimiento económico, que han dado los agentes del mercado, tanto el Banco de la República, Fedesarrollo y varios analistas económicos.
El investigador señaló que “es bueno mirar que ese ascenso ha tenido lugar desde principios del año, se presentó una baja hacia mayo, producto del retiro de la reforma tributaria, las movilizaciones sociales y la descalificación de los título de deuda soberana, pero asimilada esa situación, los resultados van en aumento”.
A su turno, Julio César Romero, analista económico de Corficolombiana, enfatizó en que esto sugiere una buena dinámica en inversión.
“Esperamos que la economía crezca 9,3%, que sería un crecimiento mayor frente a los niveles prepandemia”, dijo.
Por otro lado, 64,7% de las unidades productivas consideran que la política pública de subsidios a la nómina es la más importante.
Sectores tienen líos en el flujo de insumos
Otro de los indicadores medidos por la encuesta de la entidad son los inconvenientes de cada uno de los sectores en el abastecimiento de insumos para poder llevar a cabo una correcta ejecución de su cadena de valor.
En este punto, el Dane afirmó que por temas de disponibilidad de materias primas, el rubro de la construcción fue el que más tuvo dificultades, ya que 73,3% de las empresas registraron estar en déficit. Frente a problemas en la cadena logística e incremento en los costos, servicios e industria fueron los más afectados en octubre.
Galvis fue, en su momento, integrante del Comité de la ONU contra la Desaparición Forzada entre 2015 y 2019 y magistrada especial de la JEP
Las actividades económicas que más contribuyeron al valor agregado incluyen las actividades artísticas, de entretenimiento y recreación, así como otros servicios
Este acuerdo reafirma el compromiso de ambas entidades con el desarrollo de herramientas estadísticas de alta calidad