La Contraloría lanzó advertencias sobre el Plan Nacional de Desarrollo del Gobierno

La Contraloría General de la República presentó comentarios frente a los objetivos macroeconómicos y fiscales del Plan Nacional de Desarrollo que el Gobierno Petro planteó para el periodo 2022-2026 y señaló que este, a diferencia de versiones anteriores, no está formulado por sectores sino por temas transversales.

"Están orientados a cumplir el objetivo de hacer la transición hacia la paz total, lo cual implica que su análisis actual y posterior seguimiento son un poco más complejos. Muestra de ello es que el plan está construido sobre cinco ejes de transformación", dijo la autoridad.

Adicionalmente, explicó que el plan prevé una senda de crecimiento moderada, que estaría por debajo de 4% hasta 2026 en la que sobresalen los sectores agrícolas, manufacturero y de servicios, "restándole importancia al sector minero, dentro de la estrategia de transformación productiva" mientras que la demanda agregada estaría enfatizada en la inversión sobre el consumo interno, los sectores de vivienda y de infraestructura.

"Las perspectivas de crecimiento para los años próximos traen retos importantes como el proceso bajo el cual se hará la transición energética y la estrategia de transformación productiva, lo cual implicaría cambios estructurales en la economía de mediano y largo plazo, para dejar de depender de la industria petrolera como principal generador de divisas", recalca en su documento.

La Contraloría precisa que los procesos de transformación productiva o cambio estructural y sus impactos en el mercado laboral no se pueden cristalizar en periodos cortos, como los cuatro años del Plan Nacional de Desarrollo, sino que "implican políticas sostenidas de industrialización y apoyo a otros sectores estratégicos".

Explicó que estos cambios pueden requerir una o más décadas para hablar de resultados consolidados, con lo que el PND estaría más orientado a conformar la institucionalidad que construirá la base para lograr la transformación productiva y la reindustrialización.

Frente a esta estrategia, la CGR advierte que se requiere un "apoyo vigoroso" de la inversión pública en Investigación y desarrollo (I+D). La meta del PND es elevar la inversión en I+D de 0,24% del PIB en 2020 a 0,5% del PIB en 2026, y aunque es un cambio importante, sería insuficiente para apoyar el proceso al que le apunta el Gobierno.

En reducción de la pobreza y avanzar en equidad, la Contraloría dice que las metas del PND en estos aspectos son moderadas y que tener avances, entre 2023 y 2026, dependerán del mayor gasto social, de programas como la renta básica focalizada hacia los pobres y de avances en la reducción de la desigualdad del ingreso y la riqueza; así como del impacto de la reforma tributaria.

Finalmente, la CGR reiteró que existe un riesgo de aumento de la deuda neta del sector público que estaría relacionado con la tasa de interés real. La trayectoria de la deuda del PND y el Plan Financiero 2023 (PF23) supone una tasa de interés del 2,0% anual.