La industria de acero genera 45.000 empleos y es fundamental para la reactivación

La industria nacional de acero, como otros sectores, ha sido golpeada por los efectos económicos de la pandemia. Las siderúrgicas han hecho su mayor esfuerzo por recuperarse, trabajando a máxima capacidad. A pesar de esto, en junio de 2021, la producción de acero para concreto creció 45% respecto a mayo y está por encima de lo registrado en el 1Q 2021 (+ 15%) y por encima de los niveles de inicios del año.

Esta industria también es clave para la generación de empleo, pues la industria siderúrgica colombiana, conformada por Acerías Paz del Río, Gerdau Diaco, Grupo Siderúrgico Reyna, Sidoc S.A. y Ternium, que representan 100% de la producción nacional, genera más de 45.000 empleos directos e indirectos. Así mismo, estas empresas tienen presencia en varias regiones del país, cinco acerías y 12 plantas de laminación, con inversiones por más de US$620 millones. De hecho, durante la pandemia y con todas sus plantas apagadas, la industria preservó 100% de los empleos.

Por lo que la industria nacional de acero es generadora de empleos legales y estables, los cuales promueven el desarrollo, el mejoramiento de la calidad de vida y, sobre todo, la capacidad de adquisición por parte de los ciudadanos, hecho que termina siendo el gran dinamizador de sectores como el comercio y los servicios.

“Sin una industria siderúrgica consolidada hoy sería imposible depositar en la construcción toda la confianza para jalonar la recuperación económica del país”, indicó el Comité Colombiano de Productores de Acero de la Andi, conformado por las cinco siderúrgicas.

Esta industria nacional tiene una capacidad instalada de 2,6 millones de toneladas, suficiente para atender el crecimiento de la demanda del sector construcción y de infraestructura, con sus proyecciones a 2022 y 2023. Y si es necesario complementar la oferta nacional, se puede acceder de manera inmediata a producto originario de los principales socios comerciales de Colombia a 0% de arancel, donde existen más de 127 millones de toneladas disponibles.

El Comité indica que mientras en el país existan reglas claras que garanticen la libre competencia en igualdad de condiciones, algo de lo cual Colombia siempre ha sido respetuoso, la industria nacional continuará con su reactivación y podría generar 2.800 empleos directos adicionales.

Recientemente se han realizado inversiones como la planta de Palmar de Varela en Atlántico de Ternium, que requirió una inversión de US$100 millones y tiene una capacidad para producir 500.000 toneladas de acero. La planta está en capacidad de sustituir 100% de las importaciones que hoy en día se hacen al país, mientras genera empleo de calidad.

En cuanto al panorama internacional, la fuerte recuperación de los mercados internacionales y un crecimiento abrupto de la demanda en el segundo semestre de 2020 se tradujo en un desequilibrio de la oferta de acero. Este nuevo escenario, atado a la escasez de materias primas, hizo que aumentara el costo de estas, lo cual llevó a un incremento en los precios del acero.

Los precios internacionales de la chatarra y del mineral de hierro, insumos claves para la producción de acero, crecieron 92% y 108% durante los últimos 12 meses, respectivamente. Colombia no ha sido ajeno a estas dinámicas mundiales; el precio de la chatarra ha crecido 111% desde junio de 2020, mientras que el precio del producto terminado ha aumentado 48% en este mismo período, un menor incremento que los registrados en los mercados internacionales como México (77%) y Turquía (69%).

El Comité indicó que dichos crecimientos no tendrán una afectación sobre las iniciaciones que afrontará el sector construcción, ya que el acero tiene una participación promedio del 9,95% en la estructura de costos de los proyectos Vivienda de Interés Social (VIS) y del 4,69% en los proyectos no VIS. De hecho, al tener en cuenta la mano de obra, terrenos y permisos, entre otros elementos, el aumento de precios de este insumo clave para el sector construcción incide de manera parcial en los costos totales de estos proyectos.

Finalmente, la industria siderúrgica está comprometida con la acción climática que le permita al Gobierno Nacional avanzar en la meta de carbono neutral para 2050. Una apertura indiscriminada a las importaciones de acero para concreto terminarían afectando estas metas planteadas, si se tiene en cuenta que China produce 474,4 KgCO2 por dólar, mientras que Colombia produce 107,8.