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La carga impositiva desproporcionada que enfrentan los trabajadores independientes también contribuye a la tasa de informalidad
Durante el panel “Contratación y cobertura de la seguridad social”, que se realizó en el Foro LR "De lo informal a lo formal: repensar el mercado laboral", en alianza con Codess, Stefano Farné, economista laboral del Observatorio laboral de la Universidad Externado; Miguel Pérez García, presidente de Acoset; y William Henry Velandia Puerto, director de investigación y proyectos de la Central Unitaria de Trabajadores CUT, se refirieron a cómo, más allá de la contratación, la verdadera clave para enfrentar la informalidad se centra en la seguridad social.
Farné abrió la discusión señalando que "el problema no es el contrato laboral, sino la seguridad social". Subrayó que la informalidad se centra principalmente en los trabajadores por cuenta propia, indicando que, si de verdad se desea enfrentar la informalidad, es clave concentrarse en los cuenta propia. "Ahí es donde está el verdadero problema", dijo.
Farné explicó que el principal obstáculo no es la contratación en sí, sino el sistema de pagos de la seguridad social. "El tema no es la contratación, el tema es cómo pago la seguridad social. Si logramos encontrar una solución a este problema, afrontaríamos gran parte de la informalidad".
De acuerdo con Farné, la carga impositiva desproporcionada que enfrentan los trabajadores independientes también contribuye a la alta tasa de informalidad. "Si obligamos al independiente a formalizarse, tiene una tasa de impuestos de 130%".
En cuanto a la necesidad de contar con flexibilidad en el mercado laboral, el presidente de Acoset argumentó que el mundo del trabajo ha cambiado drásticamente y que ya no es viable operar con planteamientos rígidos enfocados exclusivamente en la contratación a término indefinido.
"Hace unos años la aspiración del trabajador era vincularse, vivir y jubilarse con la empresa. Esa era la mentalidad. Hoy, le pregunta uno a un joven cuál es su aspiración laboral, y la juventud tiene otras aspiraciones. Mucha gente joven rota en varias empresas. Ya no podemos quedarnos en esa rigidez histórica tradicional", comentó.
El dirigente propuso nuevas formas de estabilidad laboral adaptadas a las realidades modernas. "Uno de los retos es mirar otras formas como estabilidades permanentemente rotativas del trabajador". García destacó que este mundo actual propone el reto de cambiar la rigidez en el ámbito laboral.
El director de investigación y proyectos de la CUT habló de la importancia de ofrecer contratos formales que brinden garantías a los trabajadores jóvenes. "El contrato laboral debe tener unas garantías plenas hacia darles la confianza", afirmó, resaltando la preocupación de la juventud respecto a su futuro laboral. "La juventud está también en un trasegar de 'qué voy a hacer más adelante'".
Velandia subrayó que el tema de la estabilidad laboral juega un papel fundamental. “Los aportes al sistema de seguridad son claves, pero debemos mirar cómo le ofrece beneficios a la población joven". Además, enfatizó la importancia de los contratos formales para una economía más estable. "Es clave tener garantías a través de un contrato formal. Estamos hablando de una población de casi 13 millones de personas en la informalidad y eso incide en la inestabilidad de un país y en el recaudo tributario".
Farné cerró el panel señalando la necesidad de abordar la informalidad de manera integral. "Cuando hablamos de informalidad, siempre hablamos de los costos de trabajo, pero no hablamos de los otros tipos de informalidad. Las empleadas de servicio no quieren formalizarse". El panel coincidió en que una estrategia efectiva para enfrentar la informalidad debe enfocarse en la seguridad social y en adaptar el mercado laboral a las realidades actuales y las expectativas de las nuevas generaciones.
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