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El fenómeno de la Niña y su alerta de inundaciones tienen pensando al Gobierno en la declaratoria de emergencia económica
El presidente Gustavo Petro, en su visita a Santa Lucía, Atlántico, planteó la posibilidad de invocar la ‘emergencia económica’ con el fin de enfrentar y mitigar los riesgos por causa de la crisis climática y el incremento de lluvias. Más precipitaciones equivale a deslizamientos, inundaciones y crecientes que pueden paralizar varios sectores.
De hecho, el Ideam pronosticó que el fenómeno de La Niña se extendería hasta el próximo año con una probabilidad por encima de 86% y con una intensidad entre débil y moderada. Esto significaría que las precipitaciones estarían sobre los promedios históricos generados por el Ideam entre 1991 y 2020. Por tal motivo, el presidente dijo en Santa Lucía, “si vamos a vivir un episodio peor que en 2010, en el clima, entonces, el país tiene que entrar en una emergencia económica”.
Este problema ha causado eco en la Unidad de Gestión del Riesgo (Ungrd), Javier Pava, su director, aseguró que la temporada de lluvias ha significado afectaciones en 454 municipios. De estos, 131 municipios se han declarado en estado de calamidad pública, en 10 de departamentos: Chocó, Bolívar, Córdoba, Cundinamarca, Huila, Meta, Norte de Santander, Risaralda, Valle del Cauca y Antioquía.
También aseguró que ya están adelantando acciones excepcionales para afrontar la situación, “la proyección indica que estos 131 municipios que están en calamidad pública podrían triplicarse, si los que se encuentran en alerta roja se convierten en eventos, daños, pérdidas y damnificados”.
El Ideam, en su último reporte aseguró que septiembre alcanzaría volúmenes de lluvias por encima de 30% respecto a los promedios, añadieron que para septiembre la región Caribe y la Andina serán las que podrían tener los mayores volúmenes de lluvias, entre 20% a 40%.
La situación no cambiará en octubre ni noviembre pues, según el mismo informe, las predicciones de precipitaciones se mantienen entre 20% y 40% sobre los promedios registrados por la entidad, sobretodo en la región Pacífica y Andina. Es decir, lluvias mucho más fuertes.
Pero ¿qué es la declaratoria de emergencia económica?. Esta figura les permite a los gobernantes legislar durante un tiempo específico sin necesidad de pasar por el Congreso. Es decir, el presidente logra potestad legislativa durante 30 días para expedir los decretos con fuerza de ley mediante los cuales afronta la crisis (en este caso climática).
Estos decretos son remitidos a la Corte Constitucional para ser revisados y aprobados y, posteriormente, se le debe rendir un informe al Congreso. “Estos decretos tienen que tener relación directa con la crisis y todos tienen que sacar medidas pendientes a conjurarla”, explicó Jaime Arrubla, expresidente de la Corte Suprema de Justicia.
Se pueden declarar cuando ocurran “hechos que perturben o amenacen perturbar de manera grave y eminente el orden económico, social o ecológico del país”, explicó Arrubla y añadió que “son emergencias constitucionales y requiere de unos presupuestos, es decir, son los Estados excepción”.
Por tal motivo, Arrubla explicó que el presidente Petro anunció esta posible emergencia porque, según el jefe de Estado, el invierno tan acentuado constituye una amenaza para la Nación porque está causando hambre en la población, así como daño en la infraestructura vial.
De esta manera, el presidente, con la firma de todos los ministros, podría decretar esta emergencia en el momento en el que se demuestren los hechos que alteren el orden. El Congreso, durante el año siguiente de la declaratoria de emergencia puede derogar, modificar o adicionar los decretos inscritos durante este periodo.
Debido el covid-19, el Gobierno Nacional decretó el último Estado de emergencia y le permitió al expresidente Iván Duque, mediante decretos legislativos, crear todas aquellas medidas adicionales necesarias para conjurar la crisis e impedir la extensión de sus efectos.
Petro explicó que el único problema para decretar la emergencia económica es que ya se hizo una recientemente para manejar la pandemia. “Ambas tienen el mismo origen, a través de la ciencia, y el origen último es que estamos cada vez arrojando más gases a la atmósfera”.
Sin embargo, esta crisis no impediría que el presidente pueda declarar una nueva emergencia, debido a que son dos hechos distintos, así que no obstaculizaría el proceso siempre y cuando tenga acreditado y documentado que el invierno está causando una crisis. “Tiene que demostrar que no es una cosa normal”, agregó el constitucionalista Juan Manuel Charry. Aunque esta herramienta le da poder legislativo, “no puede, por ejemplo, crear impuestos o desmejorar los derechos sociales”, terminó Arrubla.
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