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El precio del Brent ha subido en los últimos días. Dentro de sus efectos está el posible aumento en la inflación de gasolina y de transporte
Con los altos precios del petróleo uno de los impactos que sentirán los colombianos, además de los mayores ingresos por cuenta de los buenos resultados de Ecopetrol, será la inflación.
El barril de Brent alcanzó ayer una precio de US$115, es decir, US$44 del precio con el que el Ministerio de Hacienda hizo los cálculos fiscales este año. Esto significa que en 2023, es posible que haya mayores ingresos. Ese es el aspecto positivo, ya que el Gobierno tendrá mayores recursos.
No obstante, afectará el precio de bienes de la canasta familiar, entre ellos los combustibles. Munir Jalil, director de investigaciones económicas de BTG Pactual, señaló que uno de los impactos directos será en el precio de la gasolina.
Durante los últimos meses, la variación de este concepto ha venido en aumento. La variación mensual en enero fue de 1,73% y la variación anual llegó a 11,75%, informó el Departamento Administrativo Nacional de Estadísticas (Dane).
Con esto, Jalil aseveró que otro aspecto que se verá impactado será el transporte. Las cifras del Departamento mostraron que en enero la variación de este ítem fue de 1,85%, siguiendo el incremento de los combustibles.
No obstante, gracias al Fondo de Estabilización de Precios de Combustibles (Fepc), este impacto se verá suavizado, destacó Jalil. Sobre este punto, Carlos Sepúlveda, decano de economía de la Universidad del Rosario, destacó que esto llevará a que haya una gradualidad en la subida de precios. “Esto quiere decir que sí hay un lapso en el que no se sentirá, pero si la subida de precios se mantiene, se verá reflejado”, añadió.
Con este mayor precio se afectarán otros aspectos como los tiquetes aéreos, así como derivados como el plástico y algunos insumos del agro.
“Bajo este contexto la inflación continuaría con presiones alcistas de manera significativa, la magnitud dependerá de la persistencia de los aumentos del precio del petróleo”, señaló Carolina Monzón, jefe de investigaciones económicas de Itaú. Señaló que todo el transporte de carga se verá impactado y también los fertilizantes, con lo que habrá un impacto indirecto en el precio de productos del agro.
No obstante, los analistas consideraron que es posible que en febrero no se vea un gran incremento en la inflación por este concepto. Este se verá en el mediano plazo cuando se traslade a los insumos y al precio de los combustibles pese al Fpec.
Este será uno de las consecuencias que los analistas consideran que puede tener el alto precio del petróleo. Destacaron también que habrá un efecto positivo en la balanza comercial, así como unos mayores ingresos por los resultados de Ecopetrol. “Por un lado da un alivio fiscal, pero somos muy dependientes del crudo en la economía y se afecta por alto precio”, dijo Sepúlveda.
Coincidieron en que este es un impacto coyuntural, por lo que sus consecuencias tanto positivas como negativas deben ser evaluadas con cautela.
No obstante, las expectativas de los analistas apuntan a que siga creciendo la inflación e incluso puede que toque un pico en el primer semestre llegando hasta 8%.
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