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El Ministerio de Hacienda inició las alzas del Acpm en montos altos para que los transportadores pudieran acomodar los precios de los fletes con más tiempo
En medio de las protestas de los conductores que atañen al país en los últimos días, se ha escuchado de un posible incremento en el precio de los fletes, un término que muchos no entienden, pero que sí afectaría las cuentas de los colombianos.
Los fletes de transporte se refieren al costo asociado al traslado de mercancías dentro del país o hacia el exterior. Este valor puede variar significativamente según diversos factores y es un elemento clave en el costo total de una operación logística.
Según la firma de analítica de datos Imétrica, el aumento del Acpm generará un incremento promedio de 7,83% en el SiceTAC para el transporte de carga. Advierten que en algunas rutas específicas el aumento podría llegar a 10%.
Para entenderlo hay que tener en cuenta que existen dos tipos de fletes. El flete fijo se determina al multiplicar el peso real de la carga por la tarifa por kilo correspondiente a una ruta específica. El flete variable, o costo de manejo, es un porcentaje calculado en función del valor declarado de la mercancía.
Los transportadores agrupados en Fedetranscarga indicaron que el valor de los fletes aumentará en 9%. Según Henry Cárdenas, presidente de la organización, se hizo todo lo posible para contener lo que consideran tendrá un gran impacto en los precios de la canasta básica, lo que describen como una “superinflación”.
El presidente Gustavo Petro hizo una crítica en su cuenta de X al gremio de camioneros, pues, según el mandatario, “permitieron que unos poderosos pusieran mayores fletes y los pequeños no pudieran subirlos si crecían sus costos”.
“Con este aumento del Acpm que se está debatiendo, que es de $2.000 aproximadamente, se suben mucho los costos y obviamente lo tienen que trasladar en el precio del flete”, manifestó Adrián Garlati, director de la carrera de Economía en la Universidad Javeriana de Bogotá.
Aumentar los fletes sería necesario ante un aumento del diésel. El incremento en el combustible es “fundamental” desde el punto de vista económico, pero desde lo financiero es completamente inconveniente, según Diego Palencia, VP de investigación de Solidus Capital. “Aumentar costos de fletes implica destruir la estructura de costos y gastos de la distribución y logística. Eso rompe la viabilidad para mantener los márgenes de ganancia”, añadió.
El experto afirma que puede que el aumento de los precios del flete lleguen incluso a estar entre 10% y 15%, en promedio.
Aunque las negociaciones entre el Gobierno y los transportadores no han llegado a acuerdos, Anif afirmó que “el aumento del precio del Acpm es inevitable”, ya que en 2023, $3 de cada $4 del déficit del Fepc se debieron a ese combustible.
El alza de los fletes podría afectar el bolsillo de los colombianos. La persona que recibe las mercancías debe pagar más debido al aumento en el costo del flete. Para no perder dinero, es necesario trasladar ese costo adicional al precio de los productos finales que se venden, de manera que las cuentas cuadren. Por lo tanto, este aumento se reflejaría notablemente en los productos finales que incluyan costos de transporte en sus precios, según explicó Garlati.
“Sobre el impacto en la inflación, creemos que el alza en el precio del diésel sería aún mayor a lo dicho por el Gobierno”, dijo Nidia Hernández, presidente ejecutiva de Colfecar.
El valor de la línea de pobreza del Dane ($1,4 millones) no logrará cubrir las necesidades básica y la compra de la canasta de alimentos. Si aumenta el combustible diésel ($2.000) y otros incrementos, le quita la capacidad de compra de estos ingresos bajos, lo que lleva a comprar menos alimentos y pone en riesgo de insuficiencia alimentaria o riesgo de hambre en la población más pobre de ingresos bajos, manifestó Esteban Nina, profesor de ciencias políticas de la Universidad Javeriana.
Los pequeños camioneros solicitan al Gobierno nacional que se haga cumplir el Sistema de Información de Costos Eficientes para el Transporte Automotor de Carga, SiceTAC, que es la tabla de fletes que refleja el precio real que deberían recibir los transportadores por cada carga.
El SiceTAC es un valor de referencia establecido por el Gobierno a través del Observatorio Nacional de Carga para fijar el costo de los fletes.
A la fecha, la Superintendencia de Transporte ha requerido a 1.138 empresas que presuntamente no han cumplido con el régimen de relaciones económicas y con los mínimos establecidos por el SiceTAC, de acuerdo con los reportes del Registro Nacional de Despachos de Carga, Rndc, correspondientes a 2022.
La determinación de los fletes en Colombia se basa en varios criterios:
El peso de la carga, calculado en kilogramos o toneladas, es un factor crucial. Se multiplica por una tarifa establecida. El espacio que ocupa la mercancía, medido en metros cúbicos, también afecta el costo. Cargas voluminosas, pero livianas, pueden generar tarifas más altas debido al espacio ocupado en el vehículo.
El costo del flete aumenta en función de la distancia entre el origen y el destino. El tipo de vehículo (camión, tren, barco fluvial) influye en el costo, ya que cada modalidad tiene valores operativos distintos.
El Gobierno Nacional sigue defendiendo el aumento del Acpm, pues aún se tiene que cerrar esta deuda. En relación con los efectos económicos de la medida, El ministro de Hacienda, Ricardo Bonilla señaló que los costos de transporte aumentarán inevitablemente, lo que afectará indirectamente el índice de precios al consumidor, principalmente debido al alza en los fletes. El ministro estimó que este incremento podría añadir 0,3 puntos porcentuales a la inflación, lo que podría llevarla a 5,5%, siempre que la situación permanezca controlada.
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