MI SELECCIÓN DE NOTICIAS
Noticias personalizadas, de acuerdo a sus temas de interés
Con la implementación de estas medidas, dijeron, el sector no solo podría ayudar al crecimiento, sino que también sería un hecho que no aportarían a la inflación
En una carta dirigida al ministro de Transporte, Guillermo Reyes, varios de los gremios de transporte de carga expusieron su preocupación de lo que podría representar el aumento de costos para el sector a lo largo de 2023.
"Considerando que no fue posible desarrollar la reunión prevista con el ministro de Hacienda y la ministra de Minas y Energía, queremos darle a conocer nuestras expectativas como sector transportador de carga, con el objetivo de mitigar los altos costos operativos que nos vienen afectando de manera significativa", dice el documento.
Las previsiones que maneja el sector va desde el aumento en los costos de los combustibles hasta la normativa de cómo se transportan productos como el carbón, la cual dicen que no debería cambiar. "Según el Dane, los combustibles pesan 40,20% de nuestra canasta de costos, por lo que la productividad del sector es extremadamente sensible a la variación de este", dijeron.
Una de las peticiones en este sentido, tal y como ya se ha hecho, es definir una nueva fórmula para la fijación los precios de los combustibles que se adapte "a las realidades del mercado colombiano en todos sus componentes, la cual debe ser el resultado del trabajo en mesas técnicas en las que los gremios debemos participar".
Bajo este supuesto, dijeron los transportadores, los precios del diésel no deberían subir hasta que se llegue a un acuerdo en dicha mesa propuesta. En cuanto a los peajes, "los precios no se
compadecen con la calidad de la infraestructura vial", categoría en la cual, agregaron, el país se ubica muy por debajo de países de la región en los índices internacionales que miden este tema
Por ende, instaron, "se deben congelar las tarifas de los peajes a nivel nacional sin distinción de la autoridad a cargo, además de suspender el cobro de los peajes ubicados en vías donde la infraestructura no sólo se encuentra en mal estado sino que no presta servicio a los usuarios brindando garantías de seguridad vial y eficiencia en sus desplazamientos".
Las restricciones en la movilidad, sin importar el motivo, hacen "que se pierda la operación de hasta cuatro meses". Por eso, dijeron, es inconcebible que las alcaldías impongan nuevas restricciones "aduciendo causas ambientales, lo cual va no sólo en detrimento del sector, sino que se encuentra en contravía de la misma Política Nacional de Logística al ver las ciudades como islas independientes y no como parte de corredores logísticos que aportan al desarrollo económico y al comercio de los territorios".
Por último, instaron, el Gobierno Nacional también deben ampliar las partidas que actualmente cuentan con beneficios en materia de exoneración de derechos de aduana a las importaciones, "y de esta manera incluir así a los vehículos de carga (15%), llantas (10%) e insumos y repuestos del sector".
Con la implementación de estas medidas, dijeron, el sector no solo podría ayudar al crecimiento -pobre según los pronósticos conocidos hasta ahora-, sino que también sería un hecho que no aportarían a la inflación, la cual también es un problema pronosticado para 2023.
Ambos protagonizaron un cruce en X por el manejo financiero del Gobierno Central, especialmente por el endeudamiento
El Dane señaló que en septiembre de 2023, las importaciones de las zonas francas crecieron 28,5%, registrando US$181,3 millones en septiembre de 2024