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Hoy arranca el racionamiento de agua en Bogotá, por motivo del bajo nivel de embalses. Alcaldía resultados anunciará cada 15 días
Hoy inicia un sistema de racionamiento del servicio de agua potable, como consecuencia del bajo nivel de los embalses que surten a Bogotá.
Según los cálculos de la Empresa Acueducto de Bogotá, el sistema Chingaza que atiende a la capital, se encuentra en estado crítico, con un 16,78% de llenado, lo que corresponde a 48,53 metros cúbicos de los 290 metros cúbicos que tiene el sistema.
En Inside LR, Natasha Avendaño, gerente de la Empresa Acueducto de Bogotá, entregó más detalles sobre cómo funcionará el sistema de racionamiento, así como las medidas que desde el Distrito se están implementando para incentivar el ahorro del líquido.
Avendaño planteó que existe la posibilidad de que las medidas se vuelvan más restrictivas, en caso de que no se alcancen los objetivos.
Hoy a las 08:00 de la mañana empieza el primer turno de restricción. Estos turnos de restricción fue una manera en la que dividimos la ciudad y los municipios a los que les prestamos el servicio o les vendemos agua con el fin de lograr una meta de reducción de consumo de dos metros cúbicos por segundo.
Esta división de la ciudad corresponde por un lado a la configuración hidráulica de nuestras redes, a la manera como las redes de acueducto están divididas en toda la ciudad, pero también con ese objetivo, lograr esa disminución.
El turno uno impacta 10 localidades, pero no en su totalidad, eso es muy importante. Que la gente entienda que porque sea la localidad Antonio Nariño, no todos los barrios de esa localidad van a estar impactados con el turno uno.
El turno arranca a las 08:00 de la mañana y se extenderá por 24 horas seguidas hasta el viernes a las 08:00 de la mañana, momento en el que inicia el restablecimiento y se inicia la restricción para el turno dos.
Son nueve turnos, lo que equivale a nueve días seguidos, uno tras otro y cuando se acaba la restricción del día del turno nueve, que es a las 08:00 de la mañana del día 10; se retoma desde el día uno.
Exactamente, por debajo es una ciudad distinta a la configuración política, porque las redes no están hechas de acuerdo a las localidades estrictamente ya que han venido respondiendo al crecimiento de la ciudad y a la manera en cómo la ciudad se ha ido expandiendo a las necesidades.
Estamos configurados en sectores hidráulicos, que ha garantizado en la empresa a lo largo de muchos años, una sectorización de las redes que nos permite poder aislar sectores completos sin tener que afectar otros en el caso de un daño, de una fuga.
El abastecimiento de Bogotá se basa en tres sistemas, uno es el sistema de Agregado Norte, que es, fundamentalmente la planta de tratamiento de agua del río Bogotá que tiene también tres embalses y que, en condiciones normales, aporta 26% del agua que consumimos en la ciudad.
El otro es el sistema Chingaza, con la plata de tratamiento de Wiesner, que está al oriente y que, en condiciones normales, si bien aporta 70% del agua. Está en este momento está en un estado más crítico. Por último, está el Agregado Sur que fundamentalmente atiende a la localidad de Usme.
Desde enero empezamos a hacer una serie de movimientos para traer el tope de producción del sistema Tibitoc porque ya veníamos observando una disminución en Chingaza. Eso nos ayudó a alargar la situación en la que estamos en este momento. A pesar de los esfuerzos, no llovió como se esperaba y nos puso más presión sobre el sistema de Chingaza.
Estamos en el sistema Chingaza en 16,78% de llenado. Estos son 48,5 millones de metros cúbicos de los 290 millones de metros cúbicos que tiene de capacidad el sistema que son los dos envases, Chuza y San Rafael. Entonces, este es el que está en un estado crítico y de alerta por la importancia para el abastecimiento de la ciudad.
Esto nos lleva a tomar la decisión de iniciar estas restricciones de abastecimiento por turnos. Es que hoy en día estamos más bajo de lo que pensábamos que íbamos a estar en 2025. Para abril no podemos seguir dependiendo de los pronósticos de lluvias que no se han cumplido hasta el momento.
Ojalá llueva bastante donde tiene que llover, que es tanto a en el embalse de Chuza, como en las cuencas de la Orinoquía y la Amazonía que surten y que llenan y abastecen el embalse. Si llueve en otras partes no nos sirve.
El agua que cae aquí en la ciudad no abastece ni San Rafael y mucho menos Chuza.
Cada 15 días vamos a anunciar la evaluación de cómo vamos para que podamos tomar la decisión de si nos mantenemos con las medidas en el nivel de restricción que están, si en algún momento podemos llegar a relajarlas o si definitivamente no hemos hecho la tarea lo suficientemente bien, entre todos ahorrando y nos toca volverlas más restrictivas.
El agua tiene que hacer un recorrido físico por las redes. Es muy probable que las zonas que están más cerca a las válvulas donde se inicia la recuperación del servicio o a los tanques de almacenamiento de la empresa, van a ser los que primero recibirán el servicio, pero en la medida en la que la gente empieza a abrir la llave se disminuirá la velocidad.
Una vez iniciamos el restablecimiento del servicio hay que abrir los hidrantes para que salga ese aire que se acumuló en las tuberías porque si no, cuando llega el agua, desplaza el aire y puede reventar los tubos.
Si no logramos los objetivos que tenemos de acuerdo como a una curva guía, que es como la curva de lo que es ideal, en cada momento del año para poder garantizar el abastecimiento de este año y del próximo, nos toca incluso antes iniciar a hacer más restrictivas las medidas.
Sí, claramente se va a ver reflejado en la factura del agua. Nosotros facturamos bimensual, entonces el siguiente ciclo de facturación que llega en dos meses, pues tiene que llegarle más bajo.
Las evaluaciones las hacemos todos los días. Lo que vamos a hacer es anuncios cada 15 días. Para que la situación se supere, necesitamos que caiga mucha agua y que seamos muy responsables en el consumo.
La esperanza, a pesar de los números, es que la gente haya tomado estos días como preparación. Lo importante aquí es tomar consciencia de cada gota que nos gastamos. Todos nos tenemos que ajustar. Por eso el énfasis en que todos seamos juiciosos con el consumo de agua en casa.
Natasha Avendaño es economista de la Universidad de los Andes, y también cuenta con una maestría en Economía de la misma casa de estudios, así como otra en Tributación Internacional, Comercio Exterior y Aduanas de la Universidad Externado de Colombia. También cuenta con una maestría en Política Pública y un doctorado en Filosofía de la Universidad de California, Berkeley.
Previo a su posesión como gerente de la Empresa Acueducto de Bogotá, Avendaño también se ha desempeñado como superintendente de Servicios Públicos Domiciliarios entre 2018 y 2022; y también experta comisionada del Creg.
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