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Los expertos aseguran que la caída en las ventas se explica por las altas tasas de interés, el aumento en los costos de construcción y los cambios en subsidios
El sector de la construcción es uno de los que evidencia la desaceleración que vive la economía este año. De hecho, entre enero y septiembre se han dejado de vender casi 92.000 viviendas, pues si se compara contra el mismo periodo del año pasado, hay una caída de 48%, pasando de 191.469 unidades a 99.501.
La caída más pronunciada en lo corrido de este año se evidencia en el segmento de interés social, dado que las ventas de VIS pasaron de ser de 138.989 unidades a 65.867, con una contracción de 52,6%. Pero las no VIS no se alejan de la tendencia, con una caída anual de 35,9% entre enero y septiembre.
Si las cifras se desagregan por regionales, se evidencia que Nariño es en la que más caen las ventas de vivienda en 2023, pasando de 1.011 a 223, con una contracción de 77,9%.
En su orden, el top 10 de los lugares en donde más caen las ventas lo completan Valle (-68,9%), Atlántico (-63,3%), Cauca (-62,6%), Norte de Santander (-60,9%), Risaralda (-56,7%), Bolívar (-53,7%), Boyacá (-53,3%), Caldas (-48,9%), y Córdoba y Sucre (-47,3%).
Sobre las razones detrás de la caída de las ventas, expertos aseguraron que hay factores clave como las altas tasas de interés y la inflación.
“Hay unas moderaciones importantes en el sector de la vivienda y tal vez hay dos razones detrás de este fenómeno. En la primera están las tasas de interés que impiden que se de el cierre financiero. Y, segundo, los costos al productor, que también están elevados. Es decir, una inflación alta y costos de producción elevados pasan factura, de tal manera que esto, sumado a unos ajustes en los programas gubernamentales, tienen al sector con una moderación significativa”, explicó David Cubides, director de investigaciones económicas de Alianza Valores.
En cuanto a las tasas, José Mojica, analista de investigaciones económicas de Corficolombiana, señaló que “seguimos viendo que hay retos que van a mantener la actividad del sector bastante limitada. Los hogares van a seguir moderando su disposición de compra de vivienda precisamente porque las tasas de interés elevadas suben el valor de la cuota mensual que debe pagar un hogar al adquirir un inmueble”.
En Inside LR el presidente de Camacol, Guillermo Herrera, advirtió que en los últimos años han aumentado los precios de la construcción. “Sabemos que tuvimos unas épocas más sensibles cuando los precios del acero se elevaron. Los precios han venido corrigiéndose pero, sin duda, los costos, no solamente por los insumos, sino también por reglamentaciones técnicas como el código de sismorresistencia, han venido afectando la construcción de vivienda. La mano de obra representa cerca de 30% del costo directo de producción de una vivienda, que se ha venido afectando con los incrementos que ha tenido el salario mínimo en los últimos años”.
Otra de las explicaciones, dijo Mojica, es la política de subsidios. “Los cupos de subsidios que se han abierto para Mi Casa Ya están siendo sustancialmente menores que los que se tuvieron en los últimos dos años, eso no deja de ser un limitante para la compra de vivienda”, y agregó que “están los cambios que le hicieron a los criterios de asignación del programa, que en últimas están generando un cuello de botella porque están priorizando hogares que no siempre acceden a un crédito hipotecario”.
La caída en las ventas ha estado acompañada de una contracción en las iniciaciones y lanzamientos. Las primeras registraron una contracción de 23,1% si se compara el periodo de enero a septiembre de 2023 contra el mismo del año pasado. Los lanzamientos han caído 44,9% en lo corrido de 2023.
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