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El proyecto que promueve Claudia López se extendería de la calle 26 hasta la 200. Algunos candidatos a la alcaldía han dicho que no están de acuerdo
Uno de los proyectos que probablemente será el centro de debate en las próximas elecciones para la Alcaldía de Bogotá va a ser el del ‘corredor verde por la séptima’. Varios precandidatos, como Rodrigo Lara y Hollman Morris han manifestado que no están de acuerdo con la obra.
Este buscaría construir un espacio de 22 kilómetros que se extenderá desde la calle 26 hasta la calle 200, y en el que convergerían Transmilenio, vehículos particulares y peatones.
En entrevista con LR, Mario Noriega, arquitecto y urbanista, explicó lo que serían algunas dificultades con las que contaría el proyecto -a punto de licitarse-, y por las cuales no sería viable.
El espacio ha sido uno de los puntos álgidos del proyecto. ¿Hay dificultades con eso?
Sí, y es sencillo. Transmilenio no cabe por la séptima. Un Transmilenio como el de la Caracas o el de la 26 requiere mucho más espacio para carriles, sobrepasos de los buses, ciclorutas, etc.
Para que quepa por la séptima, como lo están planeando y se observa en los renders, deben desviar el tráfico mixto, lo cual es grave, porque este es el de mayor densidad en la ciudad, pues ahí están los taxis, motocicletas, rutas escolares, camionetas de reparto, etc.
El tráfico mixto equivale a 86% de los vehículos que hay en Bogotá. Y para sacarlo de la séptima, eliminan todos los carriles continuos desde la calle 92 hasta la 34.
¿Y este desvío en qué podría afectar la movilidad?
Afecta la movilidad en la séptima y en 280 barrios por donde se va a desviar el tráfico. Al bloquear el tráfico mixto desde la calle 92 hacia el centro, también se bloquea indirectamente, la séptima desde la calle 200. Cuando los carros que vienen desde la 200 llegan a la 100, tendrían que desviarse por la carrera 11 o subir por la circunvalar, la cual no está lista. Además, para adecuar la carrera 11, como propuso la alcaldesa (con un carril más), se tendrían que angostar andenes, tumbar más árboles y de paso meter más tráfico a la 11.
¿Encuentra viable la propuesta de arborización relacionada al proyecto?
El primer paso del proyecto es adecuar la carrera 11 desde la calle 100 hasta la calle 64. Para hacer esto tienen que tumbar todos los árboles que hay en los andenes laterales. La alcaldesa afirmó que con el proyecto se sembrarían 9.000 árboles. Sin embargo, para hacer esto van a talar 3.000 de los que hoy existen.
López siempre ha dicho que por cada árbol que se tala, el distrito debe de sembrar 5 nuevos. En ese sentido, si van a talar 3.000 para poder adecuar el corredor, las cuentas dicen que deberían de sembrar 15.000 en lugar de solo 9.000. ¿En dónde van a poner esos 6.000 que faltan? No sabemos.
La Alcaldía proyecta una reducción a la mitad el tiempo en el transporte público. ¿Sus cálculos dan igual?
No mucho. Según la Alcaldía, va a haber 23 estaciones y 46 pasos peatonales. Con esto, habría 69 paradas, es decir, una parada cada 3 cuadras. Y si el corredor verde va a tener un largo de 22 kilómetros, el Transmilenio haría una parada en promedio cada 318 metros.
Si estimamos que el articulado en cada parada se demora dos minutos, y lo multiplicamos por las 69 paradas, tendríamos una duración 138 minutos. Es decir, en todo el trayecto se tomarían de 2:18 horas solamente en las paradas. ¿De dónde sale que el recorrido total se puede hacer en 50 minutos?
Se dice que el proyecto beneficiará principalmente a la parte norte de Usaquén. ¿Qué pasará con Chapinero y el sur de Usaquén?
Cuando quiten el paso de la séptima hacia al centro, muchos negocios de la zona van a tener afectaciones en su comercio. Cotelco estima que 40 de sus hoteles se van a ver afectados. Y las personas que vivan sobre esta zona van a tener recurrentes dolores de cabeza para cargue y descargue.
¿Considera viable que el proyecto esté atado a la construcción de la Primera Línea del Metro?
Es cierto que los recursos de la Nación están atados al plan completo de movilidad. Pero, el Metro original que está en el Conpes, y el cual está asociado al corredor verde, estaba planeado para que continuara por la Caracas y tomara la autopista hasta la 127, esto lo cambiaron. La Alcaldesa incumplió el compromiso al no hacer el segundo tramo del Metro. Si ella incumplió el compromiso con la Nación ¿por qué ahora insiste que el corredor verde sí se debe hacer?.
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