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El gerente del Emisor, Juan José Echavarría, aseguró que un incremento de entre 5% y 5,5% del salario mínimo no afectaría a la inflación y al empleo.
Tras la última reunión del año, la Junta Directiva del Banco de la República decidió mantener las tasas de interés en 4,25%, un nivel que permanece desde el 30 de abril del año pasado y el cual ya completa 20 meses sin alteraciones. La decisión se tomó tras revisar la inflación anual de 3,84% de noviembre y el crecimiento económico del país, que, según el banco central, apunta a 3,2% en 2019 y a 3,3% el próximo año.
Así lo explicó el gerente general del Emisor, Juan José Echavarría, quien detalló que este año la inflación cerraría por debajo del techo del rango (4%), pero que en 2020 se reduciría a 3%, según los estudios del equipo técnico. “La perspectivas de crecimiento global se siguen moderando y en Estados Unidos la Reserva Federal mantuvo constante su tasa de interés de referencia. Esas son razones para pensar que nuestras expectativas se lograrán”, dijo.
En medio de las proyecciones sobre lo que viene para el próximo año, Echavarría también habló sobre el incremento que debería tener el salario mínimo para 2020. “Yo no vería grandes problemas de que (el alza sea de) 5% o 5,5%. Mucho más que eso comenzaría a preocuparme por los efectos sobre inflación, sobre informalidad y sobre desempleo que son importantes”, añadió el gerente.
La razón de fondo para pensar en ese aumento, explicó, es que en los últimos años la productividad laboral ha estado entre 1% y 1,5%. Por eso, tras sumarlo con una inflación de máximo 4% este año, se lograría hasta un 5,5% considerable que no afecte otros indicadores.
“Yo no vería grandes problemas de que (el alza sea de) 5% o 5,5%. Mucho más que eso comenzaría a preocuparme por los efectos sobre inflación, sobre informalidad y sobre desempleo que son importantes”
Pese a que Echavarría indicó que seguirán evaluando las proyecciones de la actividad económica y el impacto de la Ley de Crecimiento Económico, ratificó que están viendo “un periodo relativamente largo de tasas estables”. De hecho, añadió que se espera que la Junta pueda mantener las tasas por un tiempo adicional.
“Es muy importante para bajar la incertidumbre dos cosas que están pasando: uno, que la reforma tributaria se aprobó y dos, que las marchas han tenido poco impacto sobre la economía, sobre la tasa de cambio (...) Hay que seguir evaluando el tema de cómo terminan las marchas. Eso será muy importante”, concluyó.
Es de resaltar que el Banco de la República aún no está “preocupado” por el déficit de cuenta corriente. De hecho, según las proyecciones del Emisor, en 2019 se cerraría con un déficit superior a 4% del PIB, pues continúa siendo financiado mayoritariamente por la inversión extranjera directa.
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