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Si de compara con las regiones del país, este departamento supera el PIB de todo el pacífico y está ligeramente por debajo de la Costa Caribe
La conversación sobre el centralismo y el federalismo salió a flote luego de la propuesta del candidato a la Gobernación de Antioquia por el movimiento El Parche, Mauricio Tobón, quien propuso al país una Colombia federal.
Y aunque Colombia tuvo este sistema de ordenamiento entre 1863 y 1886, en un escenario hipotético donde Antioquia, departamento de 6,7 millones de habitantes, funcione como un estado en pleno siglo XXI, se equipararía a países de la región, con un PIB de US$40.198 millones, según las cifras de 2021, calculado con la TRM de ayer y con datos del Dane.
La cifra es más significativa cuando se evidencia que si se suma el PIB de la Región Pacífica, la cual integra al Chocó, Cauca, Nariño y Valle del Cauca, resulta ser menor al que tiene Antioquia por sí solo como departamento, pues el de la Región Pacífica suma US$37.311 millones.
En otro ejemplo está la Región Caribe, la cual reúne a los departamentos Atlántico, Bolívar, César, Córdoba, La Guajira, Magdalena, San Andrés y Providencia y Sucre, que suman para la región un PIB de US$41.026 millones, este monto supera el PIB de Antioquia en solo US$828 millones.
Desde una perspectiva más amplia, si se revisa la región latinoamericana, el PIB de Antioquia es muy cercano al de Bolivia (US$ 40.408 millones) y Paraguay (US$ 39.495 millones). Y sería exactamente 2,86 veces el PIB de Nicaragua en 2021, que fue de US$14.013 millones, según las cifras del Banco Mundial.
Pese a que en la historia de Colombia suena como un sistema antiguo, a día de hoy hay países de la región que funcionan de esta forma. Por ejemplo, México, Brasil y EE.UU.
Precisamente, bajo estos ejemplos, Mauricio Tobón ha expuesto sus argumentos de la propuesta. “Estos países tienen políticas de estado que les permiten desarrollar de forma más fuerte las regiones de acuerdo a su potencial y a la identidad con el territorio”, dijo Tobón a LR. El candidato afirmó también que “estas libertades en materia tributaria, de justicia, infraestructura y políticas para la educación y la salud los hace más eficientes en el manejo de los recursos”.
El debate, entonces, lleva a cuestionar la estructura centralista que viene funcionando en el país. Según José Antonio Ocampo, ministro de Hacienda, en su texto ‘Centralismo, descentralización y federalismo en la historia Colombiana’, el proceso de centralización se dio entre los años 30 y los 80 y en resumen se basó en tres ejes: la provisión de infraestructura física, los mecanismos de intervención y regulación de la economía y el gasto público social.
El escrito de Ocampo también resalta que “la nacionalización creciente de la educación y la salud fue el último paso en el proceso de centralización del Estado colombiano”, un proceso en el que, según el autor los departamentos quedaron “sin función económica, convirtiéndolos en meras agencias políticas del Gobierno Nacional”.
En ese sentido, la mayoría de municipios colombianos pasaron a depender casi por completo de las transferencias y las agencias nacionales, y a dar relevancia a los municipios más grandes.
“Si el federalismo del siglo XIX constituyó uno de los fundamentos de la centralización del Estado en la época de la Regeneración, la centralización del siglo XX abrió el paso a una nueva descentralización fiscal en Colombia, con características cualitativamente diferentes a las de cualquier etapa anterior de nuestra historia”, narra Ocampo.
Para el analista Diego Gómez, Phd y director de Ecsim, una opción más exitosa sería la de las Zonas Económicas Especiales, algo que fue implementado en China.
“Antioquia podría integrar un Estado con el Eje Cafetero, además de Chocó y Córdoba; tenemos una relación ancestral e histórica de antes de la Constitución de 1886”.
“En la región no se han implementado como tal Zonas Económicas Especiales, sino que han funcionado como zonas francas, no con el concepto exitoso en China”.
“Tanto las regiones federales como las regiones autónomas deben aplicarse de forma general a todo un país y un sistema híbrido es difícilmente articulable y compatible, en cambio, las Zonas Económicas Especiales pueden ser de un régimen autónomo, selectivo y gradual que permite que diferentes zonas vayan entrando en la medida en que deciden asumir los compromisos que implican esa autonomía”, explica Gómez.
No obstante, Tobón no ve viable esta opción; considera que esta estrategia solamente se remite al tema económico en materia aduanera y tributaria, “se trata de crear estados para que haya más libertad a la hora de determinar las diferentes políticas públicas”, agrega.
El candidato comenta que el campo social, ambiental, la seguridad y la justicia también entran en la propuesta.
En la propuesta, el departamento puede quedar solo o unirse a regiones
Según indica Mauricio Tobón, candidato a la gobernación de Antioquia, “no se convertiría cada departamento, sino cada región en un estado”, aclara. Y agrega que tendría que darse un encuentro de regiones para determinar esos estados, “sería una nación de estados, no sería una Antioquia independiente; podría ser un estado o sumarse con otros departamentos para conformar un estado”. Para Tobón, los estados podrían tener divisiones territoriales que se llaman condados, “y sería una mejor forma de ordenarnos”.
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