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Pedro Nel Quijano, presidente ejecutivo de Aconauto
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El Gobierno defendió que con esa medida se protegería a Renault-Sofasa y los empleos que se generan en la cadena de fabricación
Los concesionarios reunidos en Aconauto manifiestaron su voz de rechazo a la intención del Gobierno de dar por terminado el Acuerdo de Complementación Económica firmado con Brasil y que permite la importación de vehículos de ese origen mediante el esquema de cupos sin arancel.
“El efecto de esta medida afecta seriamente a marcas como Renault, Chevrolet, VW, Ford, Fiat y Toyota, entre otras, y sus concesionarios, dado que se abastecen de esos orígenes, tanto en la modalidad CKD como CBU”, explicó Pedro Nel Quijano, presidente ejecutivo de la Asociación Gremial de Concesionario de Automotores, Aconauto.
"Si el Gobierno de Colombia se empeña en dar curso a esta decisión, no solamente afectaría a los ya golpeados industria y mercado nacional de automotores, sino que pierde un gran mercado a dónde exportar otro tipo de bienes y servicios colombianos", hizo notar el gremio.
Añadió que "al afectar la provisión de productos de origen brasileño a los concesionarios en Colombia se restringe el libre acceso del consumidor al mercado y se resiente la confianza inversionista, al tiempo de aumentar el desempleo".
Aconauto propuso profundizar el libre acceso de los colombianos a equipos de transporte dado el déficit que ubica al país entre los de más baja densidad automotriz por número de habitantes y PIB per cápita.
Además, el gremio insistió en la propuesta de eliminar el Impoconsumo y reducir el IVA como una medida para reactivar el decaído mercado automotor colombiano.
Desde el Ministerio de Comercio indicaron que la eventual suspensión del acuerdo "permite evitar con Renault-Sofasa una situación parecida a la de Colmotores y retener en Colombia el potencial de producción nacional de vehículos eléctricos de calidad de exportación, al igual que empleos no solo en una compañía particular sino en la industria nacional de autopartes".
El gabinete detalló que, en 2017, se adelantó una profundización del Acuerdo de Complementación Económica No. 72 (ACE 72 entre Mercosur y Colombia) y mediantecel anexo II, Apéndice 5.1, "se acordaron unas preferencias arancelarias y se establecieron cupos de importación para ciertos vehículos, en un período de 8 años a partir de su entrada en vigencia".
Con este Entendimiento se acordó otorgar de forma recíproca una preferencia arancelaria de 100% a la importación del cupo definido. Para el caso de Brasil el cupo fue de 12.000 unidades en el primer año y va hasta 50.000 en el año 8 de vigencia del acuerdo.
"La evidencia, sin embargo, ha demostrado que la finalidad del acuerdo no se ha cumplido debido a que existe un marcado desequilibrio en la balanza comercial entre Colombia y Brasil en materia de vehículos", apuntó Mincomercio.
En el acuerdo firmado, se contempla que los dos países podrán modificar el Entendimiento de común acuerdo o que uno de los dos puede manifestar formalmente su interés de no continuar aplicando el mismo, después del año 7.
El Ministerio informó que el 30 de julio se comunicó formalmente la decisión adoptada el 17 de julio, manifestando el interés de Colombia de no continuar aplicando el entendimiento sobre comercio automotor.
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