Así operan las IPS ante los impagos de facturas de las entidades promotoras de salud
SALUD

Así operan las IPS ante los impagos de facturas de las entidades promotoras de salud

lunes, 14 de abril de 2025

Así operan las IPS ante los impagos de facturas de las entidades promotoras de salud

Foto: Gráfico LR
La República Más

Las clínicas y hospitales han venido negociando con los proveedores, están implementando nuevas tecnologías para sostenerse

El sistema de salud ha sufrido detrimentos en su financiación y patrimonio. Sin embargo, las IPS del país continúan atendiendo a sus pacientes, a pesar de que algunas EPS no les pagan lo que facturan.

Directores de clínicas y hospitales han denunciado que algunas entidades promotoras de salud pagan solo 85% del total de las facturas y, en meses que cambian de interventor, pueden recibir hasta menos de la mitad.

Mientras ese capital llega a las entidades, estas deben continuar con menos recursos, atendiendo a cada vez más pacientes, ante el cierre de más de 1.000 IPS en 2024.

El gerente general de la clínica Imevi, Juan Elíseo Machado, afirmó que “ante la insuficiencia de la UPC, estamos realizando una transformación digital para optimizar procesos de agendamiento y reagendamiento de consultas, al igual que automatización de algunos procesos en la consulta de nuestros especialistas”.

Añadió que se busca una mayor adhesión a las guías de manejo y una resolución de casos con el menor número de contactos posible, con el fin de poder ser rentables. Sin embargo, “para este primer trimestre, hemos realizado con gran esfuerzo no generar pérdida, pero tampoco es el resultado que quisiéramos”, concluyó Machado.

Así operan las IPS ante los impagos de las EPS
Gráfico LR

Por su parte, en Asisfarma, que tiene presencia en Bogotá, Pereira y Barranquilla, la supervisión de la cadena de valor, desde la gestión farmacéutica hasta los servicios de atención, la implementación de modelos predictivos de resultados y nuevos modelos de negociación con las EPS (como modelos prospectivos de pago) son algunas estrategias que la IPS está usando para lograr ser sostenible y que los usuarios no paguen sus tratamientos oncológicos.

Según Juan Carlos Trujillo, gerente general de esta institución, se están “ahorrando, como dato global, 30% aproximadamente en procesos clínicos en Asisfarma”. Vale la pena destacar que este ahorro es en promedio. Es decir, hay procedimientos donde el ahorro es incluso mayor.

En Asisfarma, crecieron 17% durante 2024, pero, para Trujillo, “hemos venido creciendo, pero nos estamos dando cuenta que sí llegan con más necesidades”, al referirse que lo pacientes necesitan mayores procedimientos y que el gasto de bolsillo de los usuarios ha venido aumentando.

En la Clínica Oftalmológica del Caribe, “hemos sacrificado planes de inversión con el ánimo de poder seguir cumpliendo todos los compromisos frente a proveedores, empleados y pacientes”, afirmó su gerente general, Jorge Martínez. En este centro médico, ubicado en Barranquilla, la implementación de software para el manejo de inventarios y utilizar un bot para atender llamadas, para agendar las consultas, han sido varias de las estrategias que, desde la entidad, promueven la eficiencia.

Martínez agregó que, en medio de esta coyuntura. “Surge una oportunidad bonita y es que nos ha obligado, cada día, a ser más eficientes”.

En la clínica Neurum, en Medellín, abordan un enfoque donde el manejo integral de la población es la clave para el ahorro de costos. “Puede ser hasta tres veces más costoso que cuando el paciente necesita el medicamento en urgencias, a hacerlo de forma profiláctica”, afirmó Juan Guillermo Duque, gerente general de la clínica. Además, recalcó que “lo que hemos hablado con algunas aseguradoras es que puede haber un ahorro de 30%”.

Otro factor de ahorro es la elección del mejor medicamento posible para el paciente para que la respuesta sea óptima. “Se hace una gestión escrita sobre cada paciente, para ver cuál es el mejor medicamento y en eso hemos logrado la obtención de resultados. En solo ese cambio ahorramos un 20% en consumo de unidades”, añadió Duque.

LOS CONTRASTES

  • Juan Elíseo MachadoGerente general de Imevi S.A.S.

    “Debemos mantener la oferta de consultas hacia la población que actualmente tenemos contratada, no hemos pensado en cerrar servicios. Esto no logra eficiencia y genera barreras de acceso”.

  • Juan Carlos TrujilloGerente general de Asisfarma

    “Con cada uno de nuestros pacientes, se hace toda la trazabilidad y con eso nosotros estamos ahorrando los recursos sobre todo en los temas de medicamentos, que son de alto costo”.

Esto también dará, según el gerente general de Neurum, menos costos a futuro, ya que el deterioro corporal será menor.

Además, en Neurum, utilizan la IA para reducir tiempos y costos en tratamientos y citas. “La inteligencia artificial aplicada en áreas, como en la cámara reticular, está disminuyendo la necesidad de oftalmólogo a 20%, por ejemplo”, comentó Duque. La IA hace entre cinco y seis procedimientos, cuando el especialista hace uno. Por otro lado, en Neurum también usan la IA en temas de agendamiento de citas.

La radiografía del sistema

La salud de los colombianos ha tenido problemas de financiación en el último tiempo. De acuerdo con el exministro de Salud, Fernando Ruiz, el déficit podría llegar hasta los $24 billones. A principios de año, la Anif y Afidro, la Asociación de Laboratorios Farmacéuticos de Investigación y Desarrollo, mencionaron que la cifra era de $19,5 billones. Este desfinanciamiento ha perjudicado las deudas y patrimonio de varias de las EPS con más afiliados del país (ver gráfico).

Asimismo, las IPS han sentido el impacto en medio de la situación. En 2024, cerraron entre 1.200 y 1.300 centros médicos a nivel nacional. Según el gerente general de Asisfarma, “con la presión que se está viendo, no podemos quedar pocas IPS haciendo las cosas bien”.

El gerente general de la clínica oftalmológica Imevi, dijo que “nuestras proyecciones de ingresos son inciertas y dependen en una proporción de la situación económica de la población en Bogotá, y en otra proporción del flujo de recursos que provienen del sistema de seguridad social”.

La primera razón se explica, en parte, porque, de acuerdo con Trujillo, “el gasto de bolsillo en servicios en salud, en el global, ha subido por lo menos 15 puntos”. Es decir, cada vez más colombianos sacan dinero de su bolsillo, no de la seguridad social ni del sistema de salud, para pagar por estos servicios en las clínicas y farmacias.