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La compañía textil enfoca sus esfuerzos en la venta de inventarios y en estrategias de mitigación y reducción de gastos y costos
Las medidas adoptadas por el Gobierno Nacional para mitigar la propagación del covid -19 obligaron a Coltejer a frenar sus actividades productivas, lo que impactó el desempeño financiero de la compañía durante 2020 y 2021. Al cierre del ejercicio del año anterior, la producción no se reanudó, por lo que se enfocaron en la venta de inventario, que llegó a niveles mínimos.
Así, cuando se pensaba que 2022 sería de recuperación para la empresa textil, la compañía reveló que "no se vislumbra la reactivación de la producción durante 2022 por los altos costos que ello implica. Coltejer lleva 114 años soñando, aportando y creyendo en Colombia. Hoy está obligada a una reflexión profunda sobre cómo
afrontar el futuro".
Así, con base en la posición de liquidez de la unidad productiva a la fecha de autorización de los estados financieros y a la luz de la incertidumbre que rodea el comportamiento del covid-19, la administración afirmó que continúa teniendo una expectativa razonable de contar con los recursos adecuados para cumplir con las actividades legales y contractuales, así como de mantenimiento preventivo a maquinaria e infraestructura física, liquidación de pasivos, implementando estrategias de mitigación de gastos, reducción de costos, arrendamiento de algunas bodegas y promoción para la venta de los lotes ubicados en el Complejo de Itagüí.
Por otro lado, concentraron los esfuerzos en el pago de las obligaciones con proveedores con recursos obtenidos vía créditos y en la reestructuración de contratos con proveedores estratégicos para continuar con el mantenimiento y sostenimiento de ambos Complejos Industriales. Con este ejercicio, se presentó una ostensible reducción de costos.
Asimismo, se concretó la venta de algunos activos obsoletos, lo que generó recursos por $898 millones. Dentro de las actividades realizadas, se diseñaron y ejecutaron estrategias para la conservación y custodia de algunos activos importantes, como la maquinaria de producción de algunas de las plantas de producción, la de la Central de Energía y Vapor, entre otros.
En acuerdo con el Municipio de Itagüí, fue entregado material a título de cesión de bienes, más específicamente 6.744,53 metros cuadrados ubicados en el Complejo de Itagüí. Durante el ejercicio, se terminaron de mutuo acuerdo 583 contratos de trabajo, subsistiendo al cierre del año 172 contratos.
Es de recordar que el ejercicio de 2021 dejó resultados negativos, con una pérdida neta de $120.923 millones frente a una pérdida neta de $94,631 millones en 2020. De la misma manera, la pérdida operativa de 2021 fue de $76.835 millones, frente a una pérdida operativa de $ 67.747 millones durante 2020.
Debido al decrecimiento de las ventas por efectos de la pandemia y del cierre productivo, los ingresos operacionales presentaron una disminución de $57.904 millones, lo que representó una disminución de 77%, así como la disminución de las exportaciones y las ventas a clientes tradicionales.
También, el margen bruto pasó de -25% en 2020, a -78% en 2021, debido en gran parte a la ausencia de producción y al cargue de costos fijos. A pesar de las políticas implementadas en la reducción de costos, estos se incrementaron por encima de las ventas en $13.141 millones, lo cual representa una variación positiva de 78%.
Alejandro Weinstein, Nicolas Weinstein, Ernesto Carrizosa y Jose Frugone fueron los nombramientos confirmados por la compañía
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