“Después de la llegada de Sierra Muebles a Medellín, queremos entrar a Barranquilla”

Como efecto de la pandemia la casa se convirtió en un lugar multiusos en el que ahora se debe trabajar, estudiar, atender reuniones virtuales, ejercitarse y entretenerse, por lo que la elección de los muebles pasó a ser un elemento mucho más importante.

En ese auge, Sierra Muebles, compañía brasileña experta en diseño y fabricación, llegó a Colombia, y para conocer más sobre los planes de expansión de la compañía, LR habló con su gerente general, Carla Gianella.

¿Por qué deciden llegar primero a Medellín?

Decidimos llegar ahí por un estudio de mercado que realizamos el cual nos arrojó que Medellín era la ciudad ideal para la innovación y el diseño. Hemos visto el gusto que tienen las personas por transformar sus espacios y disfrutar de ellos, por eso llegamos a esta ciudad a presentar nuestras propuestas en muebles y decoración.

¿Cómo les ha ido en materia de ventas?

En este tiempo que llevamos en Colombia las ventas están por encima de lo que habíamos pensado. Hemos superado toda expectativa de venta.

¿Quieren llegar a otras ciudades en el país?

Tenemos planificado abrir otras tiendas después de 2021, cuando la marca esté un poco más fuerte y más consolidada. En Barranquilla sería la segunda tienda que tenemos pensado abrir, y vamos a ingresar a Bogotá una vez estemos súper fuertes en el mercado.

¿Han pensado en producir en Colombia?

No. Muebles Sierra tiene sus fábricas en Brasil, pero estamos abriendo otras puertas. Toda la gente que trabaja con nosotros aquí es gente colombiana, la idea es seguir contratando más gente a medida que la empresa vaya creciendo. Buscamos trabajar con más gente, tenemos claro en hacer alianzas con personas de acá. Nos aliamos con artistas, con empresarios, todo lo que tiene que ver con lo nativo. Pero fabricaciones solo en Brasil.

¿Cómo van en materia de responsabilidad ambiental?

En Sierra trabajan con madera que es propia de la zona, con todo el tema de reforestación muy en cuenta, lo han llevado siempre. Desde el principio dijeron que querían tener sus propios bosques y manejar el tema de reforestación.

¿Cómo han visto ese cambio en la mentalidad de los consumidores por la pandemia?

La gente se nota que tomó la conciencia necesaria para usar en sus espacios los muebles que son necesarios tanto para recibir gente, como para trabajar desde la casa; ya no es comprar por comprar, hay que pensar en su comodidad y en su durabilidad.

¿Cree que todavía hay un estigma social frente a las mujeres en cargos directivos?

Creo que sí. Aún falta cambiar esa percepción, pero hoy en día valoran mucho más todo el conocimiento y el tiempo que una mujer dedica al área en la que está. Creo que estamos avanzando mucho.

¿Cuáles cree que sean las principales dificultades?

Como emprendedora no he tenido problema en temas de escalar dentro de una compañía. Pero personalmente puedo decir que siento que el hombre puede creer que tiene el derecho de sentir superioridad frente a la mujer, eso sí lo veo, siendo yo dueña y gerente de una empresa. Me ha ido muy bien, pero cuesta un poco, por ejemplo, hacer reuniones con empresarios hombres.

Pasar más tiempo en casa aumentó las ventas
A junio de 2020, según cifras de ProColombia, el país no solo aumentó su demanda local de muebles, sino también logró exportar más de US$1 millón en el rubro de muebles y maderas a más de 11 mercados, en los que Estados Unidos, Ecuador y Panamá fueron los principales destinos.

Además, en materia digital, este buen momento para el sector les permitió a plataformas como Mercadolibre tener un incremento de más de 84% en los productos de la categoría hogar, muebles y jardín. En el caso de Linio la cifra fue de 200%, principalmente, por la tendencia de habilitar los espacios de casa para las actividades cotidianas.