Empresas Públicas de Medellín no descarta enajenar acciones de Tigo en el futuro

Ayer hubo nueva reunión entre los accionistas de Tigo: Millicom y EPM, que completaron un mes sin un acuerdo final para su capitalización, mientras que el MinTIC espera una solución antes del plazo programado para el próximo 11 de octubre.

A pesar de que no se ha llegado a un acuerdo formal se han tenido algunos consensos y así están más cerca de una conciliación. Así lo evidenció la última carta de la multinacional de Luxemburgo y que controla Tigo; en esta responden a EPM y exponen que ambos están de acuerdo con una capitalización conjunta por $600.000 millones que serán divididos en partes iguales (ambos darían de a $300.000 millones) y este movimiento sería vía colocación de acciones.

Enajenación de EPM

Pero EPM en su respuesta aclara que sigue sobre la mesa la posibilidad de participar en la capitalización con opción de una enajenación en el futuro.

Hay un interés común por “una eventual recompra por parte de Millicom de las acciones que EPM adquiera en UNE como resultado de esta capitalización”. La multinacional estaría de acuerdo con que el accionista paisa pueda cancelar su parte correspondiente ($300.000 millones) en dos plazos, el primero de forma inmediata y los $150.000 restantes antes del 31 de diciembre de 2023.

También se lee en el comunicado cómo Millicom estaría dispuesta a ampliar el plazo de la Cláusula de Protección del Patrimonio Público hasta diciembre de 2026.

Esta cláusula es una herramienta que EPM ha buscado activar y que consiste en hacer un canje de acciones en caso de que la empresa paisa no quiera seguir participando en el negocio, esto para permitirles, como su nombre lo dice, proteger el patrimonio público. En la tercera propuesta de la empresa controlante de Tigo, el punto acerca de la cláusula fue un eje, dentro del comunicado enviado a EPM por parte de Millicom.

“Ello mejora significativamente la liquidez que EPM tiene respecto a su inversión en UNE y permitiría a EPM gozar de tiempo adicional para, de así decidir hacerlo, acometer una eventual venta de su participación en UNE, en mejores y más líquidas condiciones”, decía la tercera propuesta de capitalización de Millicom.

Esta cláusula ya había tratado de ser utilizada y esta se basaba en que si EPM veía poco viable la estabilidad de la empresa, tenía la facultad de vender la misma para evitar afectaciones al patrimonio de los ciudadanos de Medellín.

“Una de las condiciones que puso el Concejo de Medellín para la fusión era que si el negocio no resultaba como se veía, EPM podía utilizar algo que se llamaba Cláusula de Protección del Patrimonio Público, que es básicamente decirle al otro socio ‘esto no está funcionando para mí, valoremos las acciones y si quiere cómpreme’, pero si la oferta es muy bajita, EPM tiene la posibilidad de salir a vender toda la compañía”, dijo Jorge Carrillo, presidente de EPM.

Tigo avanza lentamente hacia una capitalización con puntos en los que EPM y Millicom están de acuerdo. “Ambos accionistas mantenemos nuestra participación en la empresa; y ambos evitamos, en conjunto, que la misma entre en insolvencia”, dijo Mauricio Ramos, CEO de Millicom, en su última carta a EPM.

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La empresa paisa que cuenta con 49,99% de la compañía y que en reiteradas ocasiones ha mostrado su descontento con una capitalización, va encontrando puntos en común con Millicom, el accionista minoritario con 49,98% de Tigo, pero que tiene su control. El reloj va cuenta atrás para la empresa de telecomunicaciones, pues no solo tienen un plazo impuesto por MinTIC, sino que tienen compromisos futuros para octubre iguales a $235.000 millones.