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Eric Thiriez, gerente general de Antillana, dijo que Semana Santa representa casi 20% de las ventas de la empresa por el consumo
El pescado es el producto insignia de la Semana Santa. Por tradición, los colombianos aumentan el consumo de esta proteína durante ese periodo, el cual representa para algunas empresas hasta 20% de las ventas totales del año.
Tal es el caso de Antillana, una compañía que tiene una fuerte presencia en la venta de mariscos, así como un amplio portafolio de salmones y pesca blanca. Eric Luc Thiriez, gerente general de Antillana, dijo que la cuaresma, que contempla el periodo de penitencia, y acaba en Semana Santa, es muy significativo para toda la industria.
¿Por qué es tan importante Semana Santa para Antillana?
La cuaresma es quizás uno de los momentos más importantes del año para la industria de pescados y mariscos. Se sigue manteniendo una estacionalidad marcada, porque somos un país muy católico. Esa incidencia religiosa marca mucho las costumbres y el consumo en esta época, en Semana Santa y lo que llamamos los viernes de vigilia.
¿Cómo se prepara Antillana para la Semana Santa?
La cuaresma 2024 la planificamos desde julio del año anterior, y empezamos a hacer el plan de ejecución desde agosto. Lo vamos intensificando hasta que llegamos a un “non stop” que es noviembre, y se extiende hasta abril, donde toda la organización se enfoca en algunos preparativos, como conseguir el producto, los empaques, gestionar las zonas de almacenamiento, las promociones, el plan de ventas alineado con los clientes y cadenas.
Nos preparamos para ejecutar de manera impecable las siete semanas de cuaresma, y que Semana Santa cumpla con las expectativas.
¿Qué tanto incrementa el consumo de pescado en cuaresma?
Al mantener la base cultural y religiosa, y en momentos como la cuaresma, que son 40 días donde se viven los viernes de vigilia, identificamos que se mantienen el hábito de consumo. Esto hace que en la época aumente la intención de comer pescados y mariscos entre 45% y 50%.
¿Qué porcentaje de ventas representa este periodo para Antillana?
En toda la cuaresma, que son siete semanas, se concentra entre 18% y 20% de las ventas totales del año. Eso representa lo que se distribuye en supermercados, que atiende el consumo dentro del hogar, y también la ingesta fuera del mismo, que se evidencia dentro de los restaurantes y hoteles.
¿Cómo les fue en con las ventas durante 2023?
Antillana facturó $193.000 millones en 2023. Evidenciamos una contracción en el volumen del consumo de la categoría de pescados y mariscos. Las importaciones cayeron 5,4%, en comparación con 2022. Nosotros identificamos que la inflación afectó a ese volumen, tanto en los costos del producto, como en el incremento de los gastos de servicios.
Según la información de Kantar, el mercado se contrajo, pero el gasto por estos productos creció 7%.
¿Cuál es la expectativa para 2024?
Esperamos ventas por $196.000 millones. Tenemos un plan para crecer 2,5% en toda la venta agregada, en comparación con 2023, y en valor estimamos que sea entre 3% y 4%. Este año nos tiene preocupados la capacidad de compra, por eso estamos trabajando para que estas proteínas sean más asequibles para nuestros clientes.
¿Cuáles son las preferencias de consumo?
En su mayoría es lo que proviene de la pesca silvestre, que es los que se captura en los ríos y las costas, pero también se destaca la tilapia, tanto la nacional como la importada, el bagre, la lavasa y la trucha.
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