“Con la Refinería de Cartagena aportamos 17% de la gasolina total que se consume”

La Refinería de Cartagena o mejor conocida como Reficar, viene el año pasado de lograr $26,7 billones, y $2,1 billones en ganancias. Se trata de uno de los líderes en el negocio de combustible, responsable de 17% del consumo nacional.

Alrededor de 428 millones de galones por mes es el consumo de combustibles en Colombia según la Asociación Colombiana de Petróleo y Gas, ACP. Esta cifra se desglosa en 199 millones de galones/mes de gasolina oxigenada (corriente), 191 millones de galones/mes de mezcla diésel/biodiésel y 38 millones de galones/mes de jet (gasolina para aviones).

El presidente de Reficar, Herman Galán Barrera, explicó en qué consiste el plan de transición de la compañía y cómo se adaptarán a la estrategia de cero emisiones en 2050.

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¿Cómo avanza la producción de combustibles?
Somos la segunda empresa en ingresos más grande del país y somos la empresa más grande en ingresos en el Caribe. Lo primero es que gracias a que existe la refinería de Cartagena el país es excedentario en la producción de diésel, si no fuéramos excedentarios estaríamos dependiendo de traer diésel para mover camiones, tractomulas, buses, porque desafortunadamente todo el intercambio de bienes que tenemos en Colombia se mueve a través del diésel. Desde que empezó a funcionar la refinería en 2015 hasta el 31 de diciembre del año pasado el país ha dejado de importar combustibles por US$17.500 millones.

¿Cómo están las metas de producción?
Lo que aporta la Refinería de Cartagena es la gasolina, que es 17% de ese combustible que se consume en el país. Proveemos el diésel que nos hace excedentarios, en la costa somos autosuficientes en diésel y en gasolina; lo que le da la refinería al país es tranquilidad y hay muchos que lo tratan como temas de soberanía energética.

¿Entonces no ven riesgos de dependencia de un tercero o crisis por fenómenos globales?
Nos da es tranquilidad de que no estamos dependiendo de factores externos, que se presenten conflictos como el de Rusia y Ucrania, sino que nosotros tenemos el petróleo y los recursos para poder producir los combustibles.

¿Entonces en qué se concentran los desafíos?
Estamos hablando en un marco de arbitramentos y de métodos de resolución de conflictos y ahí la refinería tiene una experiencia enorme porque de los pocos arbitramentos internacionales que se manejan en Colombia, nosotros tenemos dos y tememos el más grande de las últimas décadas en Latinoamérica, que fue el arbitramento internacional que tuvimos contra CB&I, bajo reglas de la Cámara de Comercio Internacional, y eso nos dio una experiencia enorme, no solo de tener las lecciones aprendidas, sino de ver cómo uno tiene que gestionar un conflicto de esta magnitud.

¿Qué lecciones quedaron con ese caso por ejemplo en materia de estructura de contratos?
Por ejemplo en cómo uno tiene que gestionar un conflicto de esta naturaleza y ahí hay muchas lecciones para aprender tanto en cómo se estructura los contratos de los mega proyecto, sino en cómo uno tiene que estar preparado para atender los potenciales conflictos que uno tenga en esa materia.

¿Cómo aplicarán las metas de sostenibilidad del sector?
Una meta es reducir las emisiones de CO2, tenemos planes de reducción de emisiones de CO2 en 25% a 2023 y ser carbono neutral en 2050. ¿Qué estamos haciendo? Hay muchas iniciativas para poder reducirlas. Uno, producción de hidrógeno verde; dos, estamos instalando 26 MW dentro de la refinería de producción de energía fotovoltaica; y tercero estamos madurando un complejo de aromáticos que nos va a tener toda la captura de emisiones para que podamos ser carbono neutral. Es decir, una refinería que logra compensar sus emisiones de carbono.

Paralelo a la estrategia de emisiones, ¿Cómo hay un enfoque de cuidado del agua en ese plan?
La meta que tenemos es ser agua neutral en 2045, es decir, que no vamos a comprar más agua en bloque a Acuacar en el Canal del Dique, sino que vamos a tener las eficiencias dentro de la refinería y nos estamos preparando para madurar un proyecto para poder tomar agua del mar, desalinizar y poder incorporarla dentro de los proyectos. Esto nos demuestra que el problema son las emisiones, pero no el hidrocarburo como tal.

¿En qué etapa está ese proyecto?
Vamos a probar la fase de maduración. Primero se decide que va con el proyecto y después empezamos a tener compuertas de maduración: ingeniería básica, después las alternativas para hacerlo, se elige la mejor y, finalmente, vamos a llegar a una decisión final de inversión. Todo está visto en estos tres nodos para que finalmente lleguemos a 2045 como agua neutral.

¿En qué se concentra la innovación de corto y mediano plazo?
Tenemos un incentivo que se llama “los premios a la excelencia”, acá todo Ecopetrol lo que hace son propuestas que ya hayan ejecutado para poder subirlas y que sean replicables. En Ecopetrol hablamos no de sostenibilidad, sino de ‘sostecnibilidad’ y la ‘t’ la ponemos en el centro de la palabra porque no hay lugar para ser sostenibles si la tecnología no está en el centro de la sostenibilidad.
La tecnología a uno le acelera los procesos, tanto en el área de producción como soporte.