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Javier lastra, gerente general de afinia, dijo que han invertido $1.700 millones para capacitar a 450 jóvenes que harán parte de su mano de obra en las diferentes regiones
Afinia es la filial del Grupo EPM que desde hace 21 meses se ocupa de prestar el servicio de energía eléctrica en Bolívar, Cesar, Córdoba, Sucre y 11 municipios del Magdalena. La firma viene duplicando esfuerzos en inversión en infraestructura y recambio de equipos para espantar el fantasma que dejaron los años de mala gestión de Electricaribe. Javier Lastra, su gerente, reporta mejoras en indicadores como interrupciones y aumento de recaudo.
¿Cómo les ha ido en este periodo manejando la energía en los departamentos del Caribe?
Nos complace decir que nos ha ido muy bien; en estos 21 meses el grupo EPM ha realizado unas apuestas muy importantes, en materia presupuestal, en apoyo del talento humano que maneja la compañía. Los resultados se miden por medio de los usuarios; en 2019, las horas promedio de interrupción estaban en 122 horas al año por cliente, y a corte de diciembre de 2021 este mismo indicador se estableció en 89 horas por año; para este 2022 la meta es bajarlo a 84 horas.
¿Cómo lograron reducir las interrupciones en las zonas?
Durante 2021 las inversiones en este aspecto estuvieron alrededor de $543.000 millones, para 2022 se va a redoblar la apuesta. En Córdoba realizaremos una inversión de $233.000 millones; para Sucre será de $100.000 millones; Cesar contará con $178.000 y por último solo en Bolívar se invertirán $515.000 millones. Anteriormente, la última gran inversión para la región era del año 2011, en esa ocasión se invirtieron $144.000 millones, nosotros en un año superamos estas cifras con creces.
¿Cuál ha sido la mejora en los procesos de recaudo?
El grupo EPM entra en octubre de 2020; en este mes la gente estaba confinada, cuando empezamos a recibir los primeros reportes de 2021 encontramos unos procesos de recaudo que se venían deteriorando. La gente no podía ejercer sus labores económicas y esto marcaba en el indicador que se estuviera recaudando solo 77%, esto equivale a que de cada 100 pesos solo se obtenían 77. Hoy en día logramos tenerlos a niveles de prepandemia que son 84% de recaudo. Por otro lado, hay que puntualizar que el 90% del mercado de Afinia está enmarcado en estratos del cero al tres, este es un mercado de difícil gestión pero que ha venido mostrando un gran repunte.
¿Cuál es el total de usuarios que hacen uso de los servicios de la empresa?
El número de clientes es de 1.600.000 y esto se multiplica por el número de personas que conviven en cada uno de los hogares, por lo cual estaríamos hablando de un impacto de seis millones de personas aproximadamente; la demanda de energía es de casi el 12% a nivel nacional que maneja Afinia y es un jugador pleno en el sector eléctrico colombiano. Las personas aspiran que el servicio nunca falle y esto se logra por medio de inversiones, además le solicitamos paciencia a los usuarios debido a que muchos de las actualizaciones que se deben realizar requieren de interrupciones del servicio.
¿Qué retos enfrentan?
En la costa Caribe hay insuficiencia de mano de obra, por lo cual cuando necesitamos instalar medidores inteligentes o subirnos a las diferentes redes para realizar diversas operaciones no contamos con personal capacitado en esas áreas específicas. Por lo cual el reto es capacitar jóvenes que quieran estar en este ejercicio y además debemos dar un compás de espera a las compañías para que ensanchen su capacidad de producción y tenga una mejor oferta de equipos y herramientas. El primer proyecto necesitó de $1.700 millones para capacitar 450 jóvenes.
¿Hablando de los medidores inteligentes, cuál es el panorama en relación a este tema?
Tener una medida eficiente donde el usuario pueda tener un control de su consumo, es base. En este momento hemos podido instalar 28.000 medidores, la meta era un poco más alta pero debido a la falta de mano de obra hemos tenido un ritmo lento que irá avanzando cada año. Para el 2030 hemos establecido una meta de un millón de medidores instalados, y de la mano van lo medidores prepagos; esto se genera por el tipo de trabajo de la zona donde muchas familias dependen del día a día. Afinia ha sido la primera empresa que ha instalado servicios prepagos sobre los medidores inteligentes.
¿Qué proyecciones tienen para final de año y qué beneficios traen estos medidores prepagos?
La estrategia consiste en combinar el control de energía con los medidores prepagos; la idea es entrar en una dinámica de blindaje de la red. En este sentido esto permitirá tener un control de los servicios prestados; esto debido a que los usuarios no podrán hacer un bypass o acometidas irregulares. La meta es 110.000 usuarios y poder utilizar las últimas innovaciones para el control de estos aspectos; además a los usuarios o clientes que demuestren un buen comportamiento le podemos dejar los medidores tradicionales. La idea es poder avanzar en temas de pérdida de energía en las diferentes zonas.
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