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Con más de 12 años en el mercado, la empresa empezó a liquidar sus prendas en las tiendas de Medellín y de Bucaramanga
Luego de haber llegado al mercado colombiano en 2012, parece inminente la salida de la cadena minorista de moda Forever 21.El cierre del flagship store de la marca en la Zona T de Bogotá, con liquidaciones en las prendas de hasta 70%, confirmó el destino que le depara a la compañía.
Aunque todavía quedan tres tiendas ubicadas en Medellín y Bucaramanga, el destino de estos puntos de venta será el mismo. La sociedad, constituida como Alameda Colombia SAS, tuvo ingresos operacionales por $26.223 millones, con una caída de 20,15% respecto a 2022. En cuanto a utilidades, la empresa apenas registró $852 millones.
La multinacional también registró ante la Superintendencia de Sociedades un patrimonio negativo de $4.556 millones, pasivos por más de $42.507 millones y activos por $37.950 millones.
El tortuoso camino por el que ahora camina la compañía comenzó en 2019 cuando se declaró en bancarrota. En septiembre de ese año, la empresa se acogió al Capítulo 11 de la Ley de Quiebras de EE.UU., con el que planeaba cerrar 178 tiendas en ese país y otras más ubicadas en Europa y Asia.
Para entonces, la multinacional planeaba mantener sus puntos de venta en América Latina, en distintos mercados como Colombia, Brasil, México, Chile y Perú. Hace 12 años, cuando llegó al mercado doméstico con una tienda en el Centro Comercial Titán Plaza, ubicado en la capital, inició su expansión bajo la sombrilla de Ripley, de origen chileno, por Bucaramanga y Medellín.
En 2020, luego de declararse en quiebra, la operación para la región de América Latina pasó a manos del operador costarricense AR retail, un holding con experiencia en el sector moda y hogar. Para entonces, según Mall & Retail, se contemplaban 26 tiendas ubicadas en nueve países: Colombia, Costa Rica, Chile, Ecuador, El Salvador, Guatemala, Panamá, Perú y República Dominicana.
El año pasado Shein firmó un acuerdo con el propietario de Forever 21 para impulsar el alcance de las marcas. Esto le daría al gigante chino una participación cercana a un tercio en Sparc Group, para llevar las prendas de la saliente marca en la plataforma en línea.
Con esta asociación, Shein, con sede en Singapur, tenía la oportunidad de entrar a los puntos de ventas de Forever 21 en Estados Unidos. El anuncio se dio poco después de que Skechers se uniera al mercado de la firma asiática, que le permitía a los compradores adquirir productos de terceros en la plataforma.
Judy Hazbún, diseñadora de modas barranquillera, dijo que las empresas como Forever 21 eventualmente tienen que salir del sistema moda, ya que, a medida que cambia el mercado, hace falta un propósito en esta industria. “La moda tiene un propósito enorme y debe ser usado para transformar la sociedad, no solo para vestirse. A la hora de vestirse, se convierte en un mensaje de vida, estas empresas desaparecen al no encontrarlo”.
Forever 21 fue fundada en Los Ángeles, California, a mediados de la década de 1980, como una idea del empresario Do Won Chang y su esposa Jin Sook. A pesar de llegar a ser una de las compañías de moda más exitosas del mercado, poco a poco fue perdiendo terreno frente a otros competidores como Zara y H&M, que lo llevó a una dura crisis en 2019 y que empeoró con la pandemia. Las consecuencias económicas y financieras llevaron a que esta minorista de moda tuviese un mal desempeño en diferentes mercados del mundo y a que su estrategia en Colombia no funcionara.
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