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La venta completa la retirada de Anglo del carbón térmico y amplía los esfuerzos similares de BHP, en medio de la presión de los inversores
Glencore Plc comprará dos rivales en una gigantesca mina de carbón colombiana, expandiendo su producción del combustible más contaminante a medida que los precios se disparen, a pesar de los esfuerzos globales para reducir el uso.
En lo que probablemente será el acuerdo final anunciado por el director ejecutivo saliente Ivan Glasenberg, Glencore acordó comprar participaciones propiedad de BHP Group y Anglo American Plc en la mina de carbón térmico Cerrejón por alrededor de US$588 millones, sujeto a ajustes en el precio de compra.
La venta completa la retirada de Anglo del carbón térmico y amplía los esfuerzos similares de BHP, en medio de la presión de los inversores. Sin embargo, Glencore se ha comprometido a operar sus minas de carbón durante otros 30 años, lo que podría permitirle obtener ganancias a medida que sus rivales se retiran. Ya es el mayor exportador de combustible, y obtener el control total de Cerrejón le da a la compañía aún más exposición, justo cuando los precios se negocian al nivel más alto en años, impulsados por una fuerte demanda a medida que la economía global se recupera.
Como Anglo y BHP buscaban vender, Glencore siempre fue visto como el comprador más probable de la mina. El acuerdo de empresa conjunta contiene múltiples salvedades de cambio de propiedad que dificultaron la compra de nuevos socios.
Bajo Glasenberg, un ex comerciante de carbón, la compañía ha sido una firme defensora del combustible, diciendo que es esencial para proporcionar energía asequible y confiable en los países en desarrollo. Glencore también dijo que es el mejor posicionado para gestionar responsablemente su declive. Glasenberg será reemplazado como CEO por Gary Nagle, quien anteriormente dirigía el negocio de carbón de la compañía, a fines de este mes.
Esa apuesta ha dado sus frutos este año, ya que Glencore se beneficia de la subida de los precios del carbón, que se está elevando por una combinación de aumento de la demanda y limitaciones de producción en todo el mundo. Aún así, agregar más producción corre el riesgo de aumentar el escrutinio de las operaciones de carbón en expansión de Glencore a medida que continúan los esfuerzos globales para reducir el combustible.
En una concesión a los inversores preocupados por la última inversión en carbón de la compañía, Glencore dijo que ahora planea reducir sus emisiones en un 50% hasta 2035, desde un objetivo anterior del 40%. Actualmente es la única gran minera con el objetivo de ser carbono neutral para 2050.
La compañía ya se había comprometido a limitar su producción de carbón en aproximadamente 145 millones de toneladas al año y también ha establecido un camino para dejar de producir el combustible para alrededor de 2050. El acuerdo de Cerrejón todavía le permite cumplir con ambos criterios, dijo Glencore.
La compañía también dijo que es la mejor opción para operar una mina con problemas que solo se espera que dure otra década, ya que otros posibles compradores pueden ser menos responsables.
"Conocemos bien el activo y creemos que somos el administrador más responsable de Cerrejón en esta etapa de su ciclo de vida", dijo Glasenberg en el comunicado. "Deshacerse de los activos de combustibles fósiles y convertirlos en un problema de otra persona no es la solución y no reducirá las emisiones absolutas".
El carbón térmico se ha disparado en todo el mundo este año. Los precios del carbón exportado desde Australia han subido un 49% en 2021 al nivel más alto en 10 años. Los precios del combustible importado a Europa y China también se han disparado.
Para Anglo, el acuerdo marca su fin como productor de carbón térmico, tras haber separado sus activos sudafricanos a principios de este mes. La nueva minera, Thungela Resources, cotizó a una valoración inferior a la esperada en sus primeros días como empresa pública. Sin embargo, desde entonces, las acciones se han recuperado alrededor del 75% en Johannesburgo desde el cierre inicial, lo que indica un reafirmante apetito de los inversores a medida que aumenta el carbón.
El efectivo generado antes de que se cierre el acuerdo con Cerrejón significa que pagará una cantidad de efectivo de alrededor de US$230 millones, dijo Glencore.
"Importante y positiva decisión"
Al respecto, el ministro de Minas y Energía de Colombia, Diego Mesa, afirmó que esta decisión de Glencore era importante y positiva para el país, en términos de inversión y empleo.
"Esto es una muestra de la confianza inversionista en el sector minero colombiano y garantiza recursos y empleos para los habitantes de La Guajira", aseveró.
"Sabemos que el carbón es un mercado cambiante y dinámico y tenemos que irnos adaptando a las condiciones del mercado mundial", añadió y aseguró que ese es un trabajo que han llevado a cabo en el gobierno nacional.
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