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Las compañías presentarán un principio de acuerdo a la Superintendencia de Industria y comercio y esperan que los avales estén listos antes de que se haga la subasta 5G
Movistar y Tigo marcaron un hito en el sector de las telecomunicaciones en Colombia, luego de que anunciaran la firma de un memorando de entendimiento que busca crear una compañía que les permita hacer inversiones en conjunto para compartir sus redes de acceso móvil y unir esfuerzos para realizar el despliegue de nuevas tecnologías.
El acuerdo significará una fuerte competencia para Claro, el líder del sector, con 46,4% de las líneas por operador, en un momento coyuntural para la industria, pues las empresas están pendientes de las condiciones que establecerá el Gobierno Nacional para la renovación del espectro y la subasta de las redes 5G; esta última prevista para el segundo semestre.
La decisión no marca una fusión entre ambas compañías, que seguirán siendo competidoras tanto en los servicios minoristas como mayoristas. La idea es mantener su independencia y autonomía de negocios. Lo que sí significará, de materializarse el acuerdo, es la creación de una compañía independiente que les permita hacer inversiones en conjunto.
Un punto clave es que les permitirá juntar recursos para que, a través de esta nueva compañía, puedan participar juntas en las subastas de la renovación del espectro y de las redes 5G para ganar participación. Este proceso significará una fuerte inversión para las empresas del sector, cuya carga ahora podrá ser compartida.
Para entender el espectro, expertos señalan que hay que imaginarse una carretera y las bandas que se asignan como los carriles por los que viajan las comunicaciones que permiten conectar a los colombianos. Con el acuerdo, Tigo y Movistar compartirían el mismo carril y dividirían el peaje que toca pagar y que es cobrado por el Gobierno.
Además, permitiría el despliegue de infraestructura entre ambas compañías. Es decir, que ambos operadores inviertan para compartir una torre, en vez de ubicar dos por separado en un mismo lugar.
Las cuentas que hacen las firmas indican que, de concretarse el acuerdo, se podría mejorar la calidad de los servicios móviles en más de 700 municipios y la cobertura nacional se fortalecería en cerca de 10% del territorio. Acá es donde los usuarios verían los beneficios de esta unión, si bien los clientes seguirán estando suscritos al operador que hoy en día les preste el servicio.
“Es una figura que no es nueva, probablemente es nueva para nosotros, pero no en el mundo de las telecomunicaciones. En el Reino Unido, hay escenarios de compartición de infraestructuras. Lo que busca es tener una red más potente, lo que estamos buscando es impactar positivamente a los clientes”, dijo Alfonso Gómez, CEO de Telefónica Hispam.
Fabián Hernández, presidente de Telefónica Movistar. añadió que este anuncio sigue “las mejores prácticas” internacionales y recalcó la idea de que el propósito será “generar eficiencias operativas y acelerar la evolución tecnológica de las redes”.
“El acuerdo responde a la necesidad de garantizar la sostenibilidad de la oferta de conectividad, pero a través de modelos de negocio que promuevan la competencia”
“Esto nos permitirá viabilizar el despliegue de la infraestructura que necesita el país para seguir cerrando la brecha digital y prepararse para la llegada de tecnologías”
El acuerdo debe ser aprobado por la Superintendencia de Industria y Comercio y además requerirá de avales del Ministerio de Tecnologías de la Información y las Comunicaciones. Sin embargo, según pudo conocer LR, las compañías creen que conseguirán el visto bueno de las entidades del Gobierno, incluso antes de que se definan las condiciones con las que se hará finalmente la subasta del espectro.
“Buscamos marcar un hito para el sector en Colombia y Latinoamérica. En Colombia está en juego la sostenibilidad del sector de telecomunicaciones”, agregó Marcelo Cataldo, presidente de Tigo. “Este tipo de iniciativas, por un lado, mejorará la calidad de red para 35 millones de usuarios aproximadamente, por el otro, nos permitirá viabilizar el despliegue de la infraestructura que necesita el país para seguir cerrando la brecha digital y prepararse para la llegada de tecnologías futuras”.
Punto en el que Gómez también insistió al señalar que más allá del despliegue que se pueda hacer en la actualidad, lo importante son las sinergias que se abren al futuro.
Según el directivo, llegarán con una “posición de sostenibilidad” a los procesos de renovación del espectro y de subasta de la red 5G. “Un poco lo que nosotros buscamos con esto es, ya que los recursos son escasos y costosos, es que los usemos eficientemente, y ya que la infraestructura es costosa, la usemos de manera más eficiente. Esto supone un ejercicio también de razonabilidad financiera de las empresas, de decir cómo vamos a enfrentar eso. Entramos, más que con una posición de fuerza, con una posibilidad de que así nos lo podemos permitir. 5G, solos, de pronto no nos lo podemos permitir”.
Hasta finales del año pasado, las cifras más recientes que maneja el Observatorio del Ministerio de las TIC, Claro contaba con 37,5 millones de líneas móviles; seguido por Movistar, con 20,5 millones, y Tigo, con 15 millones. Más abajo están operadores como WOM (3 millones); Virgin (2,8 millones) y Móvil Éxito (1,5 millones).
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La compañía dijo que el proyecto tendrá un plazo de finalización de un año, pues se espera que se entregue a inicios de 2026
