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Los casos de Croydon, Telecom, Bavaria y la empresa de Acueducto y Alcantarillado de Bogotá vuelven a sonar en medio del paro de Avianca.
El pliego de peticiones de 84 puntos que enfrentó en un primer momento a los pilotos de Acdac con los directivos de Avianca, sumado a un cese de actividades que deja más de 300.000 pasajeros afectados en 28 días, se convirtió en un motivo de debate nacional, pero también trajo al presente situaciones anteriores en las que las empresas se transformaron tras una negociación.
Pero al debate no solo entra el rol de las partes, sino que también se ha puesto en tela de juicio la extralimitación en las convenciones colectivas. Para entender el término, Juan Manuel Guerrero, abogado de Guerrero & Asociados explicó que se habla de una extralimitación “cuando las peticiones que hace el sindicato no tienen en cuenta la realidad económica de la compañía y del país”.
Y aunque frente a Avianca hay opiniones divididas, la aerolínea revivió casos de convenciones colectivas que enfrentaron a los sindicatos con empresas como Croydon, Telecom, Bavaria y el Acueducto de Bogotá.
A finales de los años noventa, la inflexibilidad del Sintraincapla, sindicato que reunía a los trabajadores de la fabricante de tenis Croydon, “se volvió el obstáculo para que la empresa saliera de la crisis en la que se encontraba”, dice un informe.
Pues aunque la negociación estuvo acompañada por el Ministerio del Trabajo y la Supersociedades; y las directivas explicaron la necesidad de una reestructuración laboral, las partes no llegaron a un acuerdo.
Fue para 1995 cuando las consecuencias se sintieron y la pérdida operativa sumó $3.000 millones de esa época, la participación del mercado cayó 34% y las ventas 33%, lo que llevó a la empresa a desaparecer.
Pero ese no es el único caso. En 2002, en medio de una crisis que amenazaba con liquidar a Telecom, el sindicato hizo una serie de peticiones que ponían en riesgo las finanzas de la empresa, entre ellas 15% de aumento salarial.
Sin embargo, en ese momento, Hernán Román Calderón, presidente de Telecom “declaró que era necesario revisar las primas como uno de los requisitos para asegurar la viabilidad de la empresa”, para los analistas esta medida mantuvo con vida a la firma.
Lo propio pasó con otras grandes compañías. En 1993, los sindicatos de la cervecera Bavaria, iniciaron un cese de actividades luego de no llegar a un acuerdo con los directivos. En ese momento los préstamos para vivienda, las primas extralegales y el aumento salarial, eran los puntos del pliego que estaban en la cuerda floja.
Pero, además los trabajadores pedía unificar ese pliego en todas las empresas, una decisión que de ser aceptada le hubiera costado unos $51.300 millones a la compañía.
Algo similar ocurrió con la Empresa de Acueducto y Alcantarillado de Bogotá. Sus sindicatos, Sintraemsdes y Sintraserpucol solicitaron mediante un pliego de peticiones una inversión de $40.000 millones para construir cuatro canchas de fútbol, un parque y un salón de juegos. Pero además el sindicato pretendía entregar a los empleados con más de 40 años que hubieran sido retirados sin justa causa y llevaran 10 años en la compañía, recibieran un salario mínimo al mes sin estar vinculados, entre otras peticiones.
“A primera vista, el caso de Avianca no se puede ver como una extralimitación sindical, pues ellos ha reducido las peticiones en esta última semana. Sin embargo, hablando de los otros casos en algunas ocasiones estos movimientos no se daban cuenta de las dificultades fiscales que se presentaban en ese momento”, dice Avianca.
Pero la versión la controvirtió Francisco Maltés, miembro ejecutivo de la CUT, quien afirmó que “los trabajadores tienen derecho a pedir a una empresa que gana mucho”. El derecho a la manifestación es legal pero se cuestiona cuando afecta el futuro de las compañías.
Gilberto Salcedo, expresidente de la Atac asegura que “ojalá la historia no se repita porque ya han sido varios los casos empresariales en donde el exceso en las solicitudes de los sindicatos termina acabando las compañías”.
Las negociaciones colectivas y el caso de Avianca
El abogado Guerrero afirmó que el caso de Avianca será un hito en las negociaciones colectivas y consideró que “la simple lectura del pliego de peticiones deja ver que Acdac se está excediendo en sus exigencias en un país como Colombia que viene creciendo a ritmos de 1,1%”. Así mismo, el abogado corporativo Andrés Bernal dijo que no se puede caer en que cada vez que a una empresa le va bien, deba someterse a esas presiones y que el sistema sindical no fue concebido para proteger a trabajadores con este tipo de condiciones.
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