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En promedio, antes de la salida de la aerolínea, la isla recibía pasajeros de 33 vuelos diarios. Ahora operan cerca de 13 rutas
Uno de los destinos turísticos más afectados por la baja de operaciones de Viva Air ha sido San Andrés. La ocupación hotelera, que en 2022 había alcanzado 75%, pasó a 25% este año. Para el mes de enero se registró una disminución a 15, 35%.
“La disminución de la ocupación hotelera es una noticia de impacto para el Archipiélago de San Andrés y Providencia, que la vienen sufriendo desde enero. Cuando cesan por completo las operaciones con Viva Air, nos damos cuenta que otros destinos también manifiestan esos impactos como San Marta y Medellín”, agregó José Andrés Duarte, presidente nacional de Cotelco.
Desde el año pasado, la aerolínea pionera en el modelo de bajo costo en Colombia había anunciado la cancelación de algunas de las rutas que tenían como destino San Andrés, mucho antes de que en febrero de este año suspendieran las operaciones de manera definitiva.
“En promedio operaban 33 vuelos diarios a San Andrés, cuando Viva Air suspende las rutas a este destino, la conectividad cayó a 14 vuelos diarios. El impacto es la mitad de los pasajeros. Estamos recibiendo menos pasajeros, por lo que la ocupación hotelera bajó”, precisa el presidente de Cotelco.
De acuerdo con información del gremio hotelero, Quindío también disminuyó significativamente su ocupación si se compara enero de 2022 y 2023. La caída fue de 13,20% y, para Santander, fue de 7,24%.
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