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Ante la Cámara de Comercio de Barranquilla reposa una nueva inscripción directiva para controlar la empresa, de parte de Maduro
Determinar cuál será en definitiva la junta directiva legítima de Monómeros Colombo-Venezolanos, si la de Nicolás Maduro o la Juan Guaidó, será la ardua tarea que enfrentarán en últimas los dos entes competentes en el tema, como la Cámara de Comercio de Barranquilla y la Superintendencia de Sociedades. Esto, luego de que la empresa colombo venezolana se viera involucrada en varios líos jurídicos y políticos, la primera con la Supersociedades, y la segunda por un “tire y hale” entre los gobiernos de Venezuela y Colombia.
Ante la Supersociedades, Monómeros, con sede en Barranquilla, se encuentra en la actualidad bajo estado de vigilancia, luego de que el ente decidiera levantarle la medida de control. La razón por la cual Supersociedades le viene poniendo el ojo a la compañía es porque tenía un riesgo latente de volverse insolvente. Además, por su peso en la economía de Colombia e importancia en el sector de fertilizantes.
La compañía provee productos químicos para la industria y el sector agropecuario y representa 88% del mercado de abonos y fertilizantes en el Atlántico. Abastece, además, 50% del mercado nacional. En su peso económico, la empresa agroindustrial y petroquímica, que desarrolla fertilizantes y alimentos para animales, reportó en 2021 ingresos operativos por $1,01 billones, un aumento de 25% frente a 2020.
Todo lo anterior no es nada más que una muestra de la relevancia de la compañía, que por lo mismo ha tenido a Colombia y Venezuela disputándose su control. Esto, hasta la entrada del Gobierno de Gustavo Petro, pues este ha manifestado que hay que “devolverle el control” de la misma a Venezuela.
El antecedente de esto es que en 2019 el gobierno del expresidente Iván Duque rompió relaciones con Venezuela e impidió que designados de Nicolás Maduro controlarán a Monómeros. En ese entonces, Duque reconoció en Venezuela a Juan Guaidó como presidente encargado del vecino país, quien terminó nombrando a los miembros de la Junta Directiva de Monómeros.
Pero, como se mencionó, con la llegada de Petro al poder, Nicolás Maduro ha venido avanzando para recuperar el control, y lo hizo con la inscripción de una nueva Junta Directiva ante la Cámara de Comercio de Barranquilla.
¿Qué viene ahora?
A raíz de ese panorama político, se desata una premisa detrás y es quién tiene el control de la empresa Monómeros, ¿Colombia o Venezuela?
Esto, porque la inscripción de la nueva directiva, que fue realizada por Iván Enrique Sánchez Hernández como gerente general, buscará tumbar la de Guaidó.
Pero, ¿qué dice la ley? Según Diego Márquez, abogado societario, hasta el momento, la inscripción de la nueva junta designada por el gobierno de Maduro se hizo efectiva, pero, para que quede en firme, es decir, sea oficial sin riesgo alguno, deberá dejarse transcurrir 10 hábiles desde el 25 de abril (día en que radicó). Durante estos días, la radicación de la inscripción estará en vilo, ya que cualquier contra parte podrá presentar recurso de reposición.
Frente a esto, Monómeros ya se manifestó y lo hizo en contra de la junta registrada por Maduro.
“Monómeros presentará los recursos de ley para oponerse a la inscripción de las decisiones en cuestión incluidos los de reposición ante la Cámara de Comercio y apelación ante la Superintendencia de Sociedades en vista de que tales determinaciones y el acta que las contiene no se ajustan a la ley”, dijo.
Con todo esto, surge la pregunta de quién “ganará” en este lío jurídico, es decir, cuál de las dos juntas actuales, la de Nicolás Maduro o la de Juan Guaidó, será la impostora o la legítima, como en algún momento se puso en tela de juicio los gobiernos de ambos mandatarios.
Márquez dice que lo que resta por esperar es que Monómeros impugne la medida, que solo podrá ser si esta no cumple con los requisitos de ley para las actas; que la Cámara decida, y si el impugnante no está de acuerdo, el caso termine en manos de la Súpersociedades, a cargo de Billy Escobar. Funcionario que Armando Benedetti, embajador de Colombia en Venezuela, ha dicho que “nos ha ayudado mucho”.
El anuncio se da unos días después de que el gobierno de Venezuela manifestara su intención de vender a privados su participación en la empresa
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