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Los empresarios del sector energético coincidieron en puntos críticos para el sector en la quinta cumbre petrolera. El presidente de Frontera dijo que hay más claridad en la industria
Propuestas sobre la mesa, llamados y consensos del sector minero energético al Gobierno y cifras que retratan el futuro del sector en Colombia, fue lo que dejó a su cierre la quinta Cumbre del Petróleo, Gas y Energía.
Durante las conferencias y conversatorios estuvieron los grandes jugadores del sector, empezando por el “pulpo” Ecopetrol, representado por Felipe Bayón, su presidente. También estuvieron los presidentes de Hocol, Rafael Guzmán; de Canacol, Charle Gamba; de Frontera, Orlando Cabrales, Mónica Contreras de TGI; y Rafael Pinto, vicepresidente de Parex, entre otros.
Estos seis directivos coincidieron en una sola premisa: en Colombia es necesaria la transición energética, pero este proceso no debería excluir la explotación de petróleo y gas, porque también es necesario garantizar la seguridad de la fuente y contar con los recursos fiscales para financiarla. Al final, entre diferencias, observaciones y acuerdo, la conclusión del cara a cara, del sector hacia el Gobierno, es que hay una mayor claridad de la política minero energética que se propone y una flexibilización frente a los combustibles fósiles. Por lo menos así lo percibió Cabrales. Este dijo “cada vez hay más claridad en el Gobierno con la política minero energética”.
Tanto así, que por primera vez Colombia le puso una cifra a la transición energética. Mauricio Cárdenas, exministro de Hacienda, dijo que el “costo de la transición energética está entre 8% y 11% del PIB por año”.
A medida que los días de la Cumbre pasaban, la cual duró tres días, se iban conociendo las impresiones de un sector que había estado silenciado desde la llegada del nuevo Gobierno, frente a la reforma tributaria y el proyecto de transición energética, es decir, el futuro del sector.
Desde su área, el presidente de Hocol se refirió a el plan del Gobierno Nacional de acabar con la exploración de hidrocarburos. “Es mejor el gas nacional, que el importado por razones socioambientales y económicas”.
Y es que, en línea con lo anterior, Bayón fue claro en decir que el gas es clave en la transición y debe ser aprovechado. “El gas, que es la columna vertebral de la transición, lo tenemos en Colombia”. En referencia a la seguridad energética, comentó que en 2022 se viene mejorando el índice de seguridad. Pese a la incertidumbre que empaña a el sector, aunque ya menor, Bayón dijo que Ecopetrol espera crecer para 2040, 40% y 50%.
El presidente de Canacol reafirmó lo que sería un unísono en el sector: “el mundo en 2050 va seguir teniendo 50% de hidrocarburos en su matriz energética y los países que la eliminen tendrán riesgo de seguridad energética”, e insistió, al igual que Bayón, en que el país debe seguir explorando zonas de distribución de gas y mejorando la infraestructura. Por eso, el presidente de Frontera dijo que “el país sí necesita nuevas contrataciones. Necesitamos más áreas para explorar”.
Teniendo en cuenta el rol que tendrá el gas en la transición, las empresas se están poniendo en la tarea de aprovecharlo más. Por ejemplo, en el caso de Frontera, “80% del esfuerzo exploratorio que estamos llevando es sobre áreas que tienen vocación hacia el gas natural”, dijo Cabrales. De igual forma, Hocol, dijo que elevarán su producción de gas a 65 % y el resto será petróleo.
Ecopetrol estima que hay entre 70 y 100 terapíes cúbicos de gas en el Caribe costa afuera. Gamba dijo que “en Colombia hay más de 64 de tierras para explorar gas”.
Pero esta no es la única fuente potencial en la transición. En la Cumbre se dieron anuncios importantes, pues Mónica Contreras, presidenta de TGI, dijo que se encuentran haciendo pruebas de transporte de hidrógeno junto con Ecopetrol y Promigas. En el cierre de la cumbre, Bayón nombró la lista de fuentes alternativas: renovables, hidrógeno verde, hidrógeno azul y captura de carbono, “tenemos todo para liderar la transición ordenada”, expresó.
También, el vicepresidente de Parex dijo "estamos trabajando con más eficiencia y tecnología, pero ahora hay que observar mejor las emisiones de metal y ya tenemos un sistema de medición con cámaras termográficas".
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