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Por segunda vez en instancias regionales, una decisión judicial ordenó a Claro (antes Comcel) a pagar la deuda de $134.000 millones que esta empresa tiene con la Empresa de Telecomunicaciones de Bogotá (ETB), a raíz de un pleito de hace varios años.
El Tribunal de Justicia de la Comunidad Andina emitió ayer la ratificación de su sentencia del 26 de agosto de 2011, en la que señaló que ETB tiene la razón sobre la pretensiones de la empresa Comcel, hoy en día llamada Claro.
El texto de entonces, en la que se incluían las aclaraciones del Tribunal, le sirvieron al Consejo de Estado para que en agosto de 2012 anulara los laudos arbitrales que habían obligado a ETB a pagarle esa suma a Comcel por cargos de interconexión.
Las decisiones han sido apeladas por la empresa de telefonía celular que más usuarios tiene en Colombia, por lo que ha recibido acusaciones por parte de la bogotana sobre práctica dilatoria para pagar el dinero.
Además, en junio de este año el Tribunal Administrativo de Cundinamarca también le ordenó a Claro devolver el dinero que le debe a ETB. A esto, según informó este diario en la época, se le deberán sumar los intereses moratorios, que se calculan de acuerdo con los dispuesto en el Código de Comercio, con lo que la cifra podría llegas hasta $185.000 millones.
ETB emitió ayer un comunicado en el que exige a Claro que pague el dinero, y alegó que cada día que pasa se afectan los recursos del Distrito.
La historia de la disputa se remonta a hace más de una década. El 13 de noviembre de 1998 las dos compañías suscribieron un contrato para permitir el tráfico de larga distancia internacional. Luego la hoy Comisión de Regulación de Telecomunicaciones estableció la remuneración que debían tener los operadores de redes móviles. De esa decisión se dependió la pelea.
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