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El empleador tiene la obligación de afiliar a sus trabajadores a una caja de compensación familiar para que estos obtengan beneficios que estas ofrecen
Si no me gusta mi caja de compensación familiar (CCF), ¿me puedo cambiar? Esta es la pregunta que muchos colombianos pueden hacerse al iniciar un empleo, ya que esta afiliación siempre le es impuesta por su empresa para cumplir con un requisito estipulado en la ley 21 de 1982.
Las cajas de compensación están reguladas por esta norma, que establece que los trabajadores deben estar afiliados a este tipo de compañías, que ofrecen servicios y beneficios en los departamentos en los que los empleados laboren, lo que significa que principalmente la afiliación se hace por ese factor territorial.
La elección de la caja de compensación, por regla general, es del empleador. Este tiene plena libertad de elegir a cuál desea afiliar a sus trabajadores, virtud que no poseen los empleados quienes tienen que acogerse a la elección de su compañía.
La razón de esto lo explica el profesor de Derecho Laboral de la Universidad de la Sabana, Oscar Coy, que dice que “un trabajador, si bien es el beneficiario, no tiene derecho a escoger su caja de compensación porque no es el que tiene la obligación de pagarla, así como tampoco tiene derecho a elegir su ARL que cubre los riesgos laborales”. El profesor agrega que es el empleador el que tiene que gestionar la afiliación.
El factor más importante para las empresas es que los trabajadores puedan disfrutar efectivamente de los subsidios, beneficios y servicios que ofrecen las cajas de compensación, por ello, es necesario que estas operen en el departamento en el que los empleados presten sus servicios, recordando que estas cajas tienen un factor territorial, lo que significa que la mayoría no opera en todo el país.
“El empleador es libre de escoger la caja de compensación a la que desea afiliarse y afiliar a sus trabajadores. La selección se hace teniendo en cuenta el portafolio de servicios que ofrecen estas instituciones y cuáles pueden reportarle más beneficios a los empleados”, dijo Sebastián Salazar Muñoz, director de la Práctica de Derecho Laboral de Cuatrecasas en Colombia.
Una empresa podrá afiliarse a varias CCF si tiene operaciones en diversas regiones, lo que significa que si una compañía está en la Región Atlántica y en Bogotá, podrá afiliarse a dos cajas de compensación.
La contribución a la CCF es una carga parafiscal que tienen los empleadores, pero cuando se habla de trabajadores independientes (por prestación de servicios, cuenta propia, etc), estos tienen la facultad, no la obligación, de afiliarse a la caja de compensación de su elección. Este pago se encuentra establecido en 2% del ingreso base de cotización.
Ahora, si el empleador no afilia a sus trabajadores a una de estas, tendrá que pagarles un subsidio familiar.
De acuerdo con las cifras de la Asociación Nacional de Cajas de Compensación Familiar (Asocajas), del total de los afiliados del área urbana, 4,51 millones eran mujeres, lo que representa 43%, y 5,63 millones eran hombres.
Así fue el balance que hubo el año pasado
Según el informe presentado por la Superintendencia del Subsidio Familiar, con corte a 2022, la caja de compensación familiar con más afiliados en Bogotá era Colsubsidio, que tenía 1,57 millones. El balance muestra que, al cierre de diciembre de 2022, en todo el país había 10,56 millones de afiliados. Con respecto a diciembre de 2021, el número de personas presentó un aumento de 37.605 afiliados equivalente a 6%. Además, al cierre del año las regiones con más usuarios fueron la Región Bogotá - Cundinamarca con 3,94 millones y la Región Occidental con 3,74 millones. Las dos regiones agrupan 73% de la población afiliada y 10,5 millones de colombianos estaban afiliados a una caja de compensación con corte a 2022.
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