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La entidad cuenta con 28 programas de pregrado acreditados en Alta Calidad y más de 170 convenios de movilidad nacional e internacional
La Universidad Libre cerca de cumplir 100 años desde su fundación, ha recibido por parte del Ministerio de Educación Nacional la reacreditación de alta calidad por otros seis años, los cuales compensan los esfuerzos de la institución, por consolidarse como un proyecto académico serio, asequible y con verdadera movilidad a escala social.
Esta institución que se ha venido cultivando con el transcurso de las décadas de vida académica con seccionales en Bogotá, Cali, Barranquilla, Pereira, Cúcuta, Cartagena y Socorro, al día de hoy cuenta con 28 programas de pregrado acreditados en Alta Calidad y más de 170 convenios de movilidad nacional e internacional que le permiten a la comunidad universitaria acceder a una pertinente oferta académica con currículos flexibles, interdisciplinarios y abiertos, que impregnan su identidad filosófica y garantizan el buen funcionamiento, organización y cumplimiento de su función social en el marco de la educación superior.
Nelson Mancilla, rector de la seccional del Socorro, explicó que fue en 2016 cuando la institución recibió por primera vez la acreditación nacional de alta calidad, y supuso nuevos retos para la dirección académica al incorporar este ejercicio dentro de su plan integral de desarrollo con el objetivo de avanzar, fortalecer y mejorar diversos aspectos, así como generar nuevas ideas y proyectos para seguir avanzando por el camino de la alta calidad.
Entre tanto se planeó en el mediano y largo plazo, la autoevaluación de la comunidad universitaria en sus diferentes escalas que incluye a estudiantes, egresados, cuerpo de docentes, personal administrativo y empresarial, obteniendo resultados satisfactorios de cumplimiento sobre las metas planteadas, los cuales se convirtieron en los insumos suficientes para conseguir la renovación por parte del Ministerio de Educación Nacional.
“En nuestra institución hay un proceso de autoevaluación permanente que nos permite saber qué tenemos, qué necesitamos y hacia dónde vamos; y que, a su vez, nos sirve para comprobar que estamos dentro de las condiciones de calidad que exige el Consejo Nacional de Acreditación, en el marco de una cultura de mejoramiento continuo y autorregulación permanente”, aseguró Mancilla.
Al nivel regional se destaca el impacto de la Seccional del Socorro con proyectos como “Generación de valor agregado a la Caficultura de la Región”, desarrollando todos los procesos necesarios para llevar el café desde el cultivo hasta la taza, destacándose la marca propia de “Café Majavita” así como procesos de desarrollo de marca a caficultores, vinculados al proyecto; también la presencia del Consultorio Jurídico y Centros de Conciliaciones que atiendes solicitudes de población de niveles socioeconómicos 1 y 2 para el primero en mención y hasta 3 para el segundo en toda la región del Sur de Santander y la participación activa en centros de competitividad empresarial con presencia permanente en proyectos interinstitucionales alineados con el pacto por la educación en Santander.
A estos atributos, se suma la pertinencia académica de la institución en los diferentes niveles de programas (pregrados, especializaciones y maestrías), los cuales tienen la particularidad de brindar oportunidades de formación profesional con altos estándares de calidad en las provincias de los departamentos del país, a los que difícilmente llegan este tipo de ofertas, con valores de matrícula asequibles y facilidades de acceso a crédito educativo con otras entidades de financiamiento.
Esta vinculación en las diferentes áreas del país tiene un impacto transversal que caracteriza y permite a su cuerpo de egresados desempeñarse en ámbitos diversificados y pertinentes a las dinámicas de sus contextos locales bajo el desarrollo de proyectos de alta importancia, que facilitan el diálogo interinstitucional e internacional con otras comunidades académicas y científicas. En este sentido, el desarrollo de estos programas conlleva consecuentemente a la ejecución de nuevos proyectos de investigación y socialización que responden a las funciones sustantivas de la institución como son la docencia, la proyección social y la investigación, las cuales van más allá de cumplir con solamente un proyecto de formación profesional.
Se trata del proyecto para el Hospital Tatamá en Pereira, promovido por las fundaciones Tatamá, Santo Domingo y Santafe de Bogotá
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