MI SELECCIÓN DE NOTICIAS
Noticias personalizadas, de acuerdo a sus temas de interés
La información económica es la espina dorsal de la economía de mercado, que a su vez, es el único sistema probado por la historia que permite sacar a más personas de la pobreza. Los hábitos en el consumo de la información han cambiado durante los últimos 70 años, lo que impulsa a seguir generando y creando contenidos de alta calidad que construyan un mejor país.
César Eduardo Tamayo, decano de la Escuela de Finanzas, Economía y Gobierno de Eafit, y Justo Hernando Murcia, presidente de la Corporación Educativa Indoamericana, hablaron sobre los retos de transformación de la academia
En la charla sobre la visión de la academia para la reactivación económica del país, César Eduardo Tamayo, decano de la Escuela de Finanzas, Economía y Gobierno de Eafit, y Justo Hernando Murcia, presidente de la Corporación Educativa Indoamericana, conversaron sobre el aporte de las instituciones educativas a la reactivación y los cambios que las desafían diariamente para generar capital humano más calificado.
Justo Hernando Murcia, de la Corporación Educativa Indoamericana, recalco que el papel de la academia es “fundamental en la reactivación económica de un país, si bien tenemos la obligación de proporcionar el capital humano calificado y competente para afrontar los retos del mundo entero, nuestra labor está en formar en las competencias necesarias para una evolución tecnológica como la que se vive ahora”, enfatizó.
Para César Eduardo Tamayo, de la Universidad Eafit, “la reactivación económica tiene que ser una obsesión de todos”, y es donde la academia se convierte en uno de los mejores objetivos de inversión, “la academia somos organizaciones de conocimiento, de talento, dinamizamos el empleo, cualquier inversión en una institución genera empleo de calidad”, aseguró.
Tamayo, también puntualizó que otra de las misiones fundamentales de la academia es acompañar la creación de políticas y programas alrededor de la reactivación, haciendo propuestas tanto en el sector público como el privado.
En relación a la pregunta de cuál es el futuro de las carreras tradicionales, Murcia aseguró que estas deben continuar, pero que la academia debe transformarse a la par que lo hacen los nuevos componentes tecnológicos.
“Hace un tiempo atrás la tecnología se modificaba cada 10 años, hoy cada tres meses, los avances son cada vez más vertiginosos, la academia debe ir a ese mismo ritmo para producir capital humano capaz de asumir esos retos”, aseguró Murcia.
Tamayo, de la Eafit, también se refirió al tema, coincidiendo en que la academia necesita transformarse mucho más rápido, “las universidades tienen que ser dinámicas, necesitamos transformarnos, no basta con orientarnos hacia competencias, tenemos que movernos a programas que se nutran de otras disciplinas, hacerlos más flexibles y donde se pueda combinar competencias por parte de los estudiantes”.
Los cierres de compañías han protagonizado las páginas de LR. Problemas regulatorios, competitividad, ambición y hasta cuestión de suerte las liquidaron
Estos directivos cambiaron la forma de hacer negocios en las últimas siete décadas y construyeron país a través de las empresas que lideraron
En solo tres años y medio, la compañía Air-e ha logrado avances históricos en la calidad del suministro eléctrico