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La mujer enfrenta múltiples barreras para alcanzar su independencia económica a través de la participación en el mercado laboral. Diferentes factores lo explican. una de ellas es la violencia sexual reproductiva.
Desde el 8 de marzo de 2022, las empresas con más de 50 personas en plantilla están obligadas a contar con un Plan de Igualdad de Oportunidades.
En España, existe una clara desigualdad entre la remuneración promedio de mujeres y hombres por su salario de entre 18% y 20%, según el último informe del Foro Económico Mundial
La lucha por la igualdad de oportunidades sigue siendo un desafío significativo en los entornos laborales. Además, hay una percepción de que el avance del liderazgo femenino se encuentra por encima de lo que realmente está ocurriendo. En España, solo uno de cada tres CEOs, consejeros y altos directivos percibe de forma igualitaria a hombres y mujeres en las esferas profesional y personal.
A pesar de que 75% de los altos ejecutivos señalan que la diversidad es una prioridad, e incluso la sitúan entre los tres aspectos más relevantes de su estrategia, solo 37% de los empleados comparte esa misma percepción.
Así revela Mirian Izquierdo, presidente de la Fundación Woman Forward, quien presentó el primer Ranking de empresas por la igualdad de España en la sede de la Confederación Española de Organizaciones Empresariales, Ceoe.
Desde el 8 de marzo de 2022, en España, las empresas con más de 50 personas en plantilla están obligadas a contar con un Plan de Igualdad de Oportunidades, PIO, según establece la Ley Orgánica 3/2007, de 22 de marzo, para la Igualdad efectiva entre mujeres y hombres. El informe aclara que hay 12.518 planes de igualdad registrados oficialmente, lo que significa que, si en el país hay un total de 32.139 empresas de más de 50 trabajadores, 39% de las compañías obligadas lo han hecho. Es decir, 61% de las empresas aún no tiene un plan de igualdad.
“Celebramos a empresas que no solo hablan, sino que actúan; que no solo predican, sino que practican; y que muestran que la igualdad es una ganancia para todos”
En España, existe una clara desigualdad entre la remuneración promedio de mujeres y hombres por su trabajo asalariado. Esa brecha salarial está entre 18% y 20%, según el último informe del Foro Económico Mundial. Si la igualdad continúa avanzando a esta velocidad, tendrían que pasar 132 años para alcanzar la paridad total.
Según el Índice Global de la Brecha de Género de 2023, España tiene una puntuación de 0,7910 sobre uno, donde el uno es la paridad completa. Un puntaje que ha incrementado en comparación con 2022 (0,788).
“Una brecha salarial de género más estrecha no implica que haya una mayor igualdad, ya que en esto también influye el porcentaje de empleo femenino”, especifica Izquierdo.
Entre las iniciativas del país español, se encuentra el ‘Proyecto Promociona’ para impulsar que más mujeres alcancen puestos de alta dirección en las empresas; los programas ‘Clara’ y ‘Aurora’, que fomenta la autonomía personal y económica y la igualdad entre mujeres y hombres del campo rural, respectivamente; y ‘Empléate desde la Igualdad’ para incrementar la empleabilidad de las mujeres a través de su cualificación.
A esto se le suma el Instituto de las Mujeres, fundado en 1983 adscrito al Ministerio de Igualdad, aunque adoptó un papel más activo en los últimos años. Este organismo autónomo busca el desarrollo del principio de igualdad de trato y de oportunidades entre mujeres y hombres a través de programas y formando a otros agentes para que empresas, colegios, universidades y demás consigan implementar la equidad de género.
Se percibe cierta esperanza ya que 93% de las firmas cuenta con, al menos, una mujer en alta dirección, cuatro puntos por encima de la media europea (89%) y dos por encima de la media global (91%). Pero, a pesar de ver un avance, los números también muestran que solo 38% de los puestos directivos están ocupados por mujeres, por lo que aún hay un largo camino para la equidad.
Según el Instituto Nacional de Estadística, INE, de las mujeres ocupadas en 2022, 75,1% eran empleadas (con jefes y sin subordinados), 8% ocupadas independientes (sin jefes ni subordinados), 6,7% mandos intermedios, 4,9% directoras de pequeña empresa, departamento o sucursal, 4,7% encargadas, jefas de oficina, o similares y 0,4% directoras de empresa grande o media.
Con respecto al ranking de empresas de Woman Forward, las empresas recibieron la medalla de oro, plata y bronce por grupos en función también del tamaño de cada una. En términos generales, el banco CaixaBank lidera la lista, seguido del fabricante de neumáticos Michelin y del bufete de abogados Garrigues, el cual tiene presencia internacional. Ernst & Young Abogados y Santalucía Seguros completan el top cinco.
Entre las 50 compañías que conforman este listado no abundan las grandes corporaciones. “Este ranking es bastante beneficioso para las compañías de mediano trabajo, ya que es en este ámbito donde resulta más desafiante lograr la implicación de los ejecutivos”, concluye la fundadora.
Los departamentos de recursos humanos y financieros continúan siendo las áreas directivas con mayor presencia del género femenino. En recursos humanos, las mujeres ocupan 42% de las posiciones, incrementando esta cifra en 10 puntos en comparación con el año anterior, acercándose a cinco puntos por encima del promedio europeo (37%) y a 11 puntos por encima del promedio mundial (31%). En lo que respecta al sector de las finanzas, la presencia de las mujeres aumentó en siete puntos en tan solo un año, alcanzando 40%, cinco puntos por encima de los datos europeos (35%) y también cinco puntos por encima del dato global (41%).
Las disparidades de género en el empleo rural perduran debido a diversos factores sociales, económicos y políticos entrelazados. A pesar de esto, hay una causa particular que sobresale entre las demás: el papel inadvertido pero influyente de instituciones sociales que debilitan a un género en comparación con otro. De esta forma, siguiendo los datos del INE, las ocupaciones con menor porcentaje de mujeres son los trabajos cualificados en el sector agrícola, ganadero, forestal y pesquero, ya que no alcanza ni 1%, en concreto, es 0,9%. No obstante, en este último año, este sector está muy a la par con las ocupaciones militares.
La Fundación Woman Forward, en alianza con la Ceoe, realizó un ranking de las empresas con mayor inclusión laboral de mujeres, para instar a las demás firmas a seguir sus pasos.
La iniciativa que busca promover esta igualdad en Uruguay se llama la ‘Estrategia Nacional para la Igualdad de Género en 2030’
En cuanto a la representación política, se encuentra en la posición 84, con 16% de los escaños parlamento ocupados por mujeres
