La desigualdad de género en Brasil se redujo para este año y se ubicó en más de 72%

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Tal como en la región y la mayor parte del mundo, Brasil es un país en el que los hombres tienen mayor participación en las empresas y, por ende, en los cargos directivos. La brecha de género se traslada a la participación femenina y también a los salarios en el país vecino.

Para empezar, hay que decir que Brasil tiene una brecha de género de 72,6%, de acuerdo con datos extraídos de Expansión para 2023. En línea con esto, ocupa el puesto 57 del ranking de la brecha de género de 155 países, lo que lo deja por detrás de Chile (27), Perú (34), Argentina (36), Colombia (42) y Surinam (52), pero por encima de Uruguay (67) y Paraguay (91). Cabe destacar que el resultado se ha disminuido significativamente entre de un año a otro, pues en 2022 ocupó el puesto 94 de 146 países.

En este mismo enfoque, un informe del Banco Interamericano de Desarrollo, BID, encontró que en el índice Global de Brechas de Género del Foro Económico Mundial, FEM, Brasil ocupó el puesto 94 entre 146. En los ámbitos de participación y oportunidades económicas, el país sudamericano se ubica en el puesto 85, pues en participación laboral femenina se llevó el puesto 93 y en inequidad en los ingresos de mujeres se llevó el 117. Si se amplían los datos y se revisa el mercado laboral, la participación de las mujeres en el total de ingresos laborales es de 35,8%, según datos de Bloomberg.

En representación política, en el ranking del FEM, el país quedó en la posición 104, con las mujeres ocupando solamente 14,8% de los puestos parlamentarios.

La encuesta de hogares de Brasil encontró, además, que el ingreso por hora de las mujeres es en promedio 91% del ingreso de los hombres y la brecha está más pronunciada en el grupo de personas entre 36 y 45 años (84%), también entre aquellas con educación terciaria (73%), así como en las actividades de industria manufacturera (73%), establecimientos financieros, seguros e inmuebles (67%), servicios sociales y comunales (71%), comercio y ventas (74%), y en general en el sector informal (92%).
Y es que la brecha salarial persiste a pesar de que muchas veces las mujeres estén más preparadas y tienen mejor perfil laboral que los hombres, lo que, según el estudio del BID, sugiere la existencia de los sesgos de género.

Además, se encontró que, si solo se considera el perfil laboral, el salario debería ser mayor para las mujeres. Se estima que entre los posibles factores que contribuyen a la brecha están los aspectos normativos, los sesgos cognitivos y los costos laborales relacionados con el cuidado de los hijos, los cuales no se visibilizan en la sociedad.

Y aunque la mayoría de los sectores demuestran una evidente brecha de género, un dato curioso es que en el sector de la construcción las mujeres ganan en promedio 152% del ingreso por hora de los hombres, lo que se explicaría por el sesgo de selección.

En estos casos lo que sucede es que cuando hay pocas mujeres en un sector de la economía o en determinadas regiones, no es raro que las pocas que ingresan lo hagan en rangos más altos y con mejores ingresos que los hombres.

Otros sectores que están por encima del pago por hora para los hombres son los de administración y nivel intermedio (115%), explotación de minas y canteras (109%) y servicios (105%).

Una noticia alentadora es que, en los últimos 25 años de historia, la brecha de ingresos promedio por hora disminuyó de 38% a 10%.

Silvana Dilly, superintendente de Assintecal, Asociación Brasileña de Empresas de Componentes para Cuero, Calzado y Artefactos, ha participado en espacios que ponen sobre la mesa estos temas y desde su gremio ha liderado algunas iniciativas.

“El mes pasado tuve la oportunidad de compartir aula con Suelen Joner Joner, responsable de Sostenibilidad de Arezzo, y el profesor Luis Alexandre Cerveira. En esta ocasión hablamos de la experiencia de ‘Las mujeres como directivas en el mundo empresarial’, comentó, Dily. “En estos encuentros quedé convencida de que podemos fortalecernos cada vez más como industria, conectándonos y brindando un escenario para estos espacios”, agregó.

En cuanto a la legislación, en junio de este año se aprobó un proyecto de ley impulsado por el presidente Lula da Silva que protege la igualdad salarial con la imposición de una multa.

Las cinco empresas más inclusivas

La encuesta Ethos de Diversidad, Equidad e Inclusión resalta a las empresas que avanzan no solo en inclusión de género, sino también étnico-racial, Lgbtiq+, generacional y de discapacidad.

Avon

Fue el primer lugar en cuanto a la inclusión de mujeres. De hecho, 60% de sus vacantes en el nuevo centro de innovación de São Paulo recién inaugurado, fueron ocupadas por mujeres, mientras que 30% por personas negras y población Lgbtiq+.

Accenture

La multinacional de consultoría de gestión fue elegida la más inclusiva si se contemplan todas las categorías y quedó en segundo lugar en inclusión para las mujeres. La estrategia global lleva en su ADN la inclusión de mujeres y la equidad de género.

PWC

La red de firmas de auditoría y consultoría de negocios considera que la diversidad es indispensable, lo que la dejó en el tercer lugar de inclusión para mujeres. PWC trabaja en los sesgos no conscientes para solucionar las brechas.

Pepsico

Con el tercer lugar en el ranking de inclusión Lgbtiq+, Pepsico también se reconoce por la apuesta de equidad de género en la región. En Brasil, apoya iniciativas de emprendimiento y negocios en donde más de 70% de los beneficiarios son mujeres.

Mondelēz

Otra de las que figuran en la lista es Mondelēz, pues maneja varios frentes de equidad e inclusión. Tiene un programa de Inclusión Económica y Diversidad de Proveedores para proporcionar productos de personas identificadas como minorías.