MI SELECCIÓN DE NOTICIAS
Noticias personalizadas, de acuerdo a sus temas de interés
El fruto de su trabajo y la decisión de comprender la historia del arte para incorporarla en su propio contexto e inquietudes está presente en miles de obras que son patrimonio para muchos
Las obras podrían subir más de 20% tras su fallecimiento, casas de subastas ya sienten la fiebre de inversionistas que buscan comprar
La buena acogida de un artista, además de en su reconocimiento a nivel mundial, se nota en las cifras. Y en el caso de Fernando Botero no fue diferente el panorama.
Según el último ranking de la revista People With Money, de los 10 pintores mejor pagados de 2023, el antioqueño se amasó una fortuna de más de US$82 millones entre pinturas, esculturas, dibujos y bocetos.
Una vez tomó fuerza, su arte no dejó de estar vigente, dice Catalina Martínez, directora de la casa de subastas LeFebre en Bogotá, con lo que los precios en el mercado siempre fueron llamativos para los inversionistas.
No es raro entonces, que se haya quedado con el récord de ser el artista latino con la obra de arte mejor pagada en una subasta internacional. El hito se lo dio ‘Hombre a caballo’, que se vendió el 11 de marzo de 2022 en la casa británica Christie’s por US$4,3 millones.
“El mercado de Botero es uno que estuvo siempre vigente, mantuvo una estructura comercial fuerte, tenía un buen inventario de su obra, y fue, posiblemente, después de Picasso, el artista con más producción. Su valoración permanente en el mercado internacional y el gusto que logró desarrollar en diferentes culturas, lo hizo alcanzar los estándares más altos en la economía del arte”, comenta Martínez.
Si bien, la bolsa del ‘boterismo’ fue significativa, esta seguiría sumando, pues se estima que luego de su fallecimiento sus obras puedan aumentar el precio hasta 20%. En LeFebre, por ejemplo, esta semana se subastó un dibujo de tinta sobre cartón hecho en 1993, el precio de salida fue de $35 millones y, dice Martínez, compradores la han llamado a ofrecerle hasta cinco veces ese precio, para quedarse con la obra.
“Los precios de mercado siempre han estado en los más altos niveles, lo aprecian y saben que cada peso que se invierte lo vale, no solo por la importancia que tuvo, sino por el legado que dejó frente a todos los artistas”, añade la directora de la Casa.
Según explica Martínez, esta fiebre de los inversionistas que ella define como “un fenómeno especulativo” comenzó desde la muerte de su esposa Sophia Vari en mayo de este año.
“Hay coleccionistas que deciden guardar las obras para que con el paso del tiempo se valoricen, pero también hay otros que deciden venderlas porque sí como pueden subir de precio, no están exentos de que se puedan depreciar, pero hay que reconocer que con artistas de esta talla, se espera un crecimiento”, preciso.
Páginas como MutualArt.com en donde se recopilan agendas de subastas internacionales, calculan que de sus obras más de 200 están o en lotes o listadas para la venta. Entre los destacados está ‘Naranjas’ de 1990, el cual está disponible en la página de Christie’s, el registro para participar cierra en 13 días y el precio estimado es entre US$60.000 y US$80.000.
Las obras del maestro botero han recorrido desde Sudamérica hasta Asia y Europa, ya sea con exposiciones fijas en museos y plazas
El fruto de su trabajo y la decisión de comprender la historia del arte para incorporarla en su propio contexto e inquietudes está presente en miles de obras que son patrimonio para muchos
Son tantas las obras que realizó el maestro botero durante su trayectoria global, que los expertos no se atreven a hacer un estimado