En Enka trabajamos con premisa de que transformamos ordinario en extraordinario

Desde que definió hace 15 años que la sostenibilidad sería un eje fundamental en su estrategia corporativa de largo plazo, Enka ha consolidado su liderazgo en la implementación de procesos de economía circular, tras identificar oportunidades muy atractivas en las botellas de PET posconsumo.

Partiendo de la premisa de que “donde la mayoría ve basura, nosotros vemos oro”, la empresa ha invertido en este lapso cerca de US$160 millones en la generación tecnológica y el diseño de nuevos procesos que le permiten hoy elaborar 54% de sus productos con materias primas recicladas.

Se estima que este aporte suba a más de 70% cuando entre en operación la nueva planta ubicada en Girardota, antes de que finalice 2022, y en la cual la compañía ha invertido US$40 millones para producir más resina de PET reciclada, que servirá como materia prima para fabricar nuevas botellas.

Todo esto ha sido posible, dice Álvaro Hincapié, presidente de la compañía, gracias al conocimiento que han acumulado en los más de cincuenta años que llevan en la industria, tanto en Colombia como en Latinoamérica, lo cual facilitó la transición de fabricar el PET virgen con derivados del petróleo a un producto basado en reciclaje.

También lo han hecho, agrega el directivo, con el aporte del talento humano que tiene la empresa, el cual ha permitido encontrar soluciones innovadoras apalancadas en la fortaleza técnica y la alta ingeniería.

“Definimos la economía circular como la estrategia para poder transformar lo ordinario en productos extraordinarios. En 2007 tomamos la decisión de incursionar en el reciclaje de las botellas y convertirlas en EKO®Fibras, un producto con el cual competimos en el mercado internacional en la actualidad. Luego, en 2014 nos involucramos con la resina EKO®PET, tomando las botellas y convirtiéndolas en materia prima para hacer botellas amigables con el medio ambiente, aptas para el contacto con alimentos y homologadas por las principales marcas de bebidas del mundo”, señala Hincapié.

La economía circular, viable y rentable
Enka ha demostrado, con un compromiso decidido e irrestricto, que sí es posible aportar por la implementación de procesos de economía circular que sean viables y rentables.

En la actualidad la compañía cuenta con tres plantas en operación: una en la que se procesan botellas para ser transformadas en EKO®Fibras y EKO®Filamentosque permiten elaborar prendas ecológicas; otra en la que las botellas son convertidas en resina EKO®PET para fabricar botellas aptas para el contacto con alimentos y bebidas; una más, en la que se recogen las tapas y las etiquetas y se convierten en EKO®Poliolefinas , cerrando así el ciclo de la botella y aprovechándola en su totalidad.

“De este modo nos aseguramos de que la compañía tenga cero desperdicios en estos procesos”, enfatiza el presidente, quien asegura que con la nueva planta que está en construcción Enka se convertirá en una de las productoras de resinas de PET reciclado más importantes del mundo, duplicando los beneficios para el planeta y aumentando las tasas de recolección, pasando de tres millones a seis millones de botellas al día.

Desafíos por superar
Implementar estos procesos no ha sido tarea fácil. Dice el directivo que el principal reto es garantizar el suministro de botellas recicladas, pues eso implica salir a recoger más de seis millones cada día.

El segundo desafío es el ecodiseño de los productos que son susceptibles de reciclar, pues en ocasiones esto impide que se puedan aprovechar en nuevos procesos productivos. Y en tercer lugar, Hincapié menciona la cultura del reciclaje, que en países como el nuestro aún está muy rezagada, aunque en los últimos años se han dado avances, que siguen sin ser suficientes.

“En 2007, cuando comenzamos a recoger botellas para comenzar con la operación de nuestra primera planta dos años después, el reciclaje en Colombia era completamente incipiente y cuando hablábamos de economía circular, pocos sabían qué era eso. La tasa de recolección de PET era de 2%. Hoy es de 31% y con la nueva planta que inauguraremos este año alcanzaremos el 50%, con niveles muy cercanos a Europa”, dice el presidente de Enka.

Por otra parte, para recolectar las botellas en todo el país Enka creó Eko Red, una compañía, que hoy es la mayor red de captación de botellas en Colombia, con presencia en 900 municipios de toda la geografía nacional, a través de la cual, además de fomentar el reciclaje, tiene connotaciones sociales por la generación de empleo, la formalización de unidades productivas y el aumento de los ingresos para miles de personas que se dedican a esta actividad, llevando con ello bienestar a sus familias. Las tres plantas de reciclaje actuales de Enka, sumadas al nuevo proyecto generan beneficios para los recicladores de más de $200.000 millones al año.

Por último, la compañía ha desarrollado y promocionado entre los fabricantes de envases una guía de diseño, para que las botellas sean elaboradas con componentes de reciclabilidad que faciliten su aprovechamiento.

Estas y otras acciones permiten dimensionar el alcance que ha tenido la decisión que hace quince años tomó Enka en su propósito de crecer de manera sostenible, de generar un valor compartido con las comunidades y los territorios, y de hacer que en Colombia la economía circular sí sea posible.