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Está cada vez más cerca la temporada de cesantías. Acá le mostramos lo que debe saber
Los empleados colombianos pidieron el año pasado $5,5 billones.
Según la Asociación de Administradoras de Fondos de Pensiones y Cesantías (Asofondos), el año pasado los trabajadores colombianos retiraron $5,5 billones de su ahorro en cesantías, esta cifra fue superior en $470.000 millones con respecto a 2017.
Del monto retirado, $1,84 billones fueron usados por terminación de contrato laboral, mientras que los retiros relacionados con vivienda se distribuyeron en $1,61 billones para la compra y $1,34 billones asociados con la liberación de la deuda hipotecaria y mejoras locativas. Además, se destinaron $540.000 millones para el financiamiento de la educación superior de los trabajadores y/o sus hijos.
Las cesantías son una prestación social a la que tiene derecho todo trabajador. Su objetivo principal es amparar al afiliado en caso de quedar desempleado o cesante. Sin embargo, la ley colombiana permite destinar el ahorro de las cesantías para temas relacionados con el pago de educación del afiliado, de sus hijos, de su cónyuge o compañero/a permanente en entidades de educación superior y para comprar, construir o realizar mejoras a la vivienda.
En ese sentido, Tatiana Pérez Zea, gerente de canales de servicio de Protección, destacó que en 2018, en la entidad, 29,42% de los retiros de cesantías fueron con motivo de desvinculación laboral, 9,16% para pago de educación y 49,92% para pagos de remodelación y compra de vivienda.
Entre tanto, según información de Porvenir, la razón principal por la cual sus afiliados solicitaron un retiro total de sus cesantías el año pasado fue por terminación de contrato. Para el caso de retiro parcial de cesantías, las razones principales fueron: la adquisición de vivienda, mejora o liberación de vivienda, educación superior (pregrado y postgrado) y pago de programas de educación para el trabajo y el desarrollo humano (antes denominada Educación No Formal).
No obstante, es importante resaltar que las cesantías también pueden ser destinadas a reparaciones locativas, pago de créditos hipotecarios y pago de impuestos como el predial y el de valorización.
“Nuestra principal recomendación siempre será que los trabajadores asuman estos recursos como el mejor seguro de desempleo y en ese sentido que las ahorren”, manifestó Alain Foucrier, presidente de la AFP Colfondos.
Así mismo, Foucrier agregó que en Colfondos, “50% de los retiros fueron producto de terminación de contrato, 37% se destinó a vivienda y 13% restante a educación. Lo anterior ratifica la importancia que tienen estos recursos para las personas que quedan cesantes”.
Por otro lado, María Cristina Londoño, presidenta del Fondo Nacional del Ahorro (FNA), indicó que, los afiliados a la entidad retiraron la suma de $1,9 billones correspondientes a sus cesantías.
“En 2018, 56% de nuestros afiliados destinó sus cesantías para su vivienda propia, para disminuir el saldo de su crédito hipotecario con el FNA o para mejorar su vivienda”, agregó Londoño.
Por su parte, Clara Inés Guzmán Nieto, líder del programa de bienestar financiero de Old Mutual, agregó que durante el año pasado, los retiros por parte de los afiliados de los fondos de cesantías de la entidad totalizaron aproximadamente $91.000 millones.
Los independientes pueden ahorrar voluntariamente
De acuerdo con información de Porvenir, vale la pena aclarar que los empleadores no están obligados a reconocer esta prestación a los trabajadores con salario integral (más de 10 Smlmv), por eso, tanto este tipo de trabajadores como aquellos que son independientes, y cuentan con un contrato por prestación de servicios, pueden ahorrar voluntariamente en un fondo de cesantías.
Una noción clave para los empleados es que las rentabilidades no se pueden asegurar por las dinámicas de mercado.
En caso de que se apruebe tardaría seis meses en revisión.
Los fondos de largo plazo dan más rendimiento a futuro.