Hay esperanza de que el segundo semestre será positivo

Con un crecimiento total de 1,2% en el primer semestre del año en el que destacaron sectores como agricultura con 6,1% y servicios financieros con 4,1%, el panorama económico de Colombia afronta un semestre decisivo de cara a la recuperación en el que el Gobierno espera como balance final un aumento en el PIB cercano al 2%, mientras que para 2018 las proyecciones se ubican en 3%.

En este rol juegan un papel determinante entidades como el Banco de la República a través de la reducción de las tasas de interés de intervención que actualmente se ubica en 5,50 % y que “con sus recientes disminuciones estimulan el consumo de los colombianos y la inversión bastante disminuidos en el período interanual, a pesar de mostrar señales de recuperación y dinamismo para el segundo semestre de 2017”, explicó Alberto Rodríguez, economista de la Universidad Eafit.

Desempeños en indicadores que registran movimientos positivos en las últimas mediciones como la tasa de desempleo que se ubica en 8,7% y la estabilización de la inflación en 3,4%, en el rango de meta de 2% y 4% del Emisor, “son necesarios que continúen en una dinámica favorable para reactivar la economía que, no obstante, atraviesa mejores momentos que la mayoría de países latinoamericanos”, apuntó Rodríguez.

A su vez, el comportamiento de la inversión extranjera directa y el movimiento de importaciones y exportaciones marcan un sendero de recuperación para las diferentes industrias en Colombia en el corto plazo.

Así lo señaló Javier Díaz, presidente ejecutivo de Analdex, “se espera un sector exportador más dinámico durante el segundo semestre del año tras la recuperación de los precios del petróleo. La expectativa está puesta principalmente sobre el sector minero energético, pero también sobre productos como el café, cuyo precio ha aumentado gradualmente tras la reducción de la oferta brasilera durante los últimos meses”.

De acuerdo con datos de esta asociación, se estima que a final de año el balance en exportaciones no tradicionales sea positivo con un aumento cercano al 15% con respecto a 2016 y que supere los US$ 35.000 millones.
Por su parte en materia de inversión extranjera directa (IED) a partir del repunte de los precios del petróleo durante los últimos meses, “se prevé que los flujos destinados al sector minero-energético también aumenten.

Igualmente, se ha observado dinamismo en los flujos de IED hacia el sector de servicios financieros, empresariales, servicios comunales y hacia el sector agrícola durante el último año. Por lo tanto, esperamos que para el segundo semestre estos sectores continúen siendo atractivos para la inversión”, añadió Díaz.

En este sentido, la apertura a campos emergentes como el financiamiento de proyectos climáticos y bonos verdes representan nuevas oportunidades de inversión con el propósito de conjugar desarrollo económico. social y ambiental.

Sean Kidney, CEO de Climate Bonds, indicó sobre este tema que “los bonos verdes son herramientas disponibles para canalizar inversiones de capital necesarias para financiar este cambio. Colombia enfrenta retos para lograr combinar el desarrollo económico y social con bajo crecimiento en emisiones”.

Desarrollo de infraestructura es clave para Inversión Extranjera Directa

El desarrollo de los proyectos de vías 4G se ha convertido en uno de los programas bandera del actual Gobierno que, con una inversión aproximada de $47 billones, pretende transformar la productividad y jalonar la competitividad de todos los sectores económicos de Colombia. A su vez, este desarrollo representará una mayor confianza por parte de los inversionistas extranjeros, según las expectativas del Gobierno. Los avances en materia de IED se reflejan en períodos como el segundo semestre de 2016 donde se invirtieron US$907 millones más que en el mismo período de 2014 y que espera continuar con esta dinámica.