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Los líderes mundiales se reunirán en medio de múltiples preocupaciones, que van desde la guerra de Rusia en Ucrania hasta los temores de que se avecina una recesión mundial en medio del aumento del costo de vida
Liu dijo que el país había eliminado los requisitos de cuarentena y otras restricciones, y aseguró que “la puerta de China al exterior solo se abrirá más”
En un discurso especial en el 53º Foro Económico Mundial, el viceprimer ministro de China, Liu He, ofreció garantías a los participantes sobre la continuación de la liberalización y la relajación de las restricciones en el sector inmobiliario de China.
Mientras China lucha contra una ola de covid, Liu señaló que el país había eliminado los requisitos de cuarentena y otras restricciones de viaje que habían estado vigentes desde principios de 2020. “La puerta de China al exterior solo se abrirá más”, dijo.
Liu repitió la formulación presentada por primera vez por el presidente Xi Jinping en 2017, y reiteró que en China los mercados desempeñarán un “papel decisivo en la asignación de recursos”. Él dijo: “Algunas personas dicen que China optará por la economía planificada. Eso es de ninguna manera posible”.
Liu señaló que el sector inmobiliario, que vio cómo los titanes se enfrentaban al colapso en 2021 y 2022, incapaz de cumplir con las obligaciones de la deuda, sigue siendo un pilar de la economía china. “Representa casi 40% de los préstamos bancarios, 50% de los recursos fiscales generales de los gobiernos locales y 60% de los activos de los hogares urbanos”, dijo. “Si no se manejan adecuadamente, es probable que los riesgos en el sector de la vivienda desencadenen riesgos sistémicos”.
“Hemos relajado las restricciones que se introdujeron una vez para abordar el sobrecalentamiento en el mercado inmobiliario”, agregó, refiriéndose a las “Tres líneas rojas” introducidas en agosto de 2020.
Buscando disipar los temores de que la agenda de Prosperidad Común de China equivalía a una redistribución radical de la riqueza, Liu la describió como una “tarea a largo plazo que requiere un enfoque incremental y gradual” y no como algo que se logra de la noche a la mañana. Dijo que la Prosperidad Común tenía como objetivo prevenir la polarización, y agregó: "La prosperidad común no es de ninguna manera sinónimo de igualitarismo o bienestar".
En un claro eco del discurso de Davos del presidente Xi en 2017, Liu subrayó el compromiso de China con la globalización. “Nos oponemos al unilateralismo y al proteccionismo y esperamos fortalecer la cooperación internacional con todos los países para la estabilidad y el desarrollo económicos mundiales y la promoción de la reglobalización económica”.
Afirmó los objetivos gemelos de China de alcanzar las emisiones máximas de carbono antes de 2030 y lograr la neutralidad de carbono para 2060. “La neutralidad de carbono es una obligación internacional de China”, dijo. “Esto también es lo que China necesita para impulsar el crecimiento interno. No es algo que se nos impone, sino algo que queremos hacer”.
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