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En esta edición especial, LR se enfocó en las cifras de la economía naranja en el país y sus beneficios
Durante el primer año de gobierno se consolidaron las bases para articular 70 programas de 21 entidades nacionales, alcanzando inversiones directas por el orden de $819.000 millones
La Economía Naranja es una estrategia que genera oportunidades para Colombia y sus territorios diversos, a partir del arte, la cultura y la creatividad como motores de desarrollo social y económico.
Estamos asistiendo a un momento histórico para nuestro país, en el que la creatividad y la cultura están en el centro de nuestra agenda pública. Este hecho se traduce en que logros como, por ejemplo, el Consejo Nacional de Economía Naranja donde tienen asiento siete Ministerios y cinco entidades de relevancia como el Departamento Nacional de Planeación, el Sena, Findeter, la Dirección Nacional de Derechos de Autor y el Dane.
Durante el primer año de gobierno se consolidaron las bases que han permitido articular 70 programas de 21 entidades nacionales alcanzando inversiones directas por el orden de $819.000 millones.
Los resultados de la Cuenta Satélite de Cultura y Economía Naranja del Dane y el Ministerio de Cultura reflejan que en 2018 la Economía Naranja aportó $28,4 billones al valor agregado de la economía nacional, lo que representa 3,2% del total en este indicador para el país.
Adicionalmente, en el mismo año, en términos de empleo asociado a la Economía Naranja, el sector cultural y creativo ocupó directamente a 539.932 personas, lo que representa 2,35% del total del país, una cifra superior a sectores tradicionales de la economía nacional como el de minas y canteras.
Estudios realizados por Confecámaras en 2019 demuestran que de cada 100 empresas que se crean en Colombia al cabo de cinco años sobreviven 36, mientras que en el sector de la Economía Naranja sobreviven 38.
De igual modo, la creación de empresas de Economía Naranja creció a 9,4% entre el primer semestre de 2018 y el primer semestre de 2019, a menos de un año de implementación de la política.
Los colombianos e inversionistas están empezando a entender las infinitas posibilidades, oportunidades y beneficios que tiene apostarle al desarrollo de la cultura y la creatividad.
En términos macroeconómicos, desde el Gobierno Nacional le estamos apuntando a cerrar 2022 con una Economía Naranja 35% mayor a la de 2018, es decir pasar de 3,2% a 3,8% del PIB.
Queremos que Colombia se proyecte ante el mundo como un país diverso, creativo e innovador y que empecemos a construir una nueva narrativa a partir de la identidad cultural y la creatividad como los recursos renovables del presente y el futuro, y como una fuente inagotable de riqueza.
Es importante tener en cuenta que la Economía Naranja también contribuye a salvaguardar el patrimonio cultural, fortalece nuestra identidad, potencia la diversidad de las regiones y al mismo tiempo genera oportunidades en los territorios, permitiendo el cierre de brechas sociales y la reconstrucción social.
Gracias a esta política, los Proyectos de Interés Nacional y Estratégico (Pine), de alto impacto en el crecimiento económico y social de Colombia, ahora fortalecen el desarrollo de los sectores culturales y creativos.
Pero al mismo tiempo se fortalecen los procesos de los artistas y gestores culturales independientes, ya que ampliamos la oferta institucional para apoyar la creación y la gestión de proyectos del sector. La invitación a todo el país es a que veamos la Economía Naranja como una plataforma que apalancará nuestro crecimiento y nos conducirá por una senda de desarrollo sostenible y de fomento de nuestro talento. Es la herramienta que tendrá Colombia para competir en el entorno del Siglo XXI.
Con corte a septiembre, se crearon 7.447 empresas de este tipo y el crecimiento fue de 10,3%, respecto al mismo lapso de 2018.
Ciudades como Bogotá, Cali, Medellín, Barranquilla y Manizales buscan albergar los espacios creativos
Las actividades relacionadas con las industrias funcionales, de nuevos medios y software fueron las que tuvieron mayor participación