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Ya se completa un mes de bloqueos, marchas y protestas por el paro nacional
El foco debe estar en devolverle la confianza a los comerciantes, para así retornar a la dinámica de marzo y recuperar la productividad de los últimos dos meses
La dinámica que experimentó Colombia el pasado marzo fue una aproximación a la reactivación social y económica que se pretende. El alza de 11,8% que presentó el PIB para ese mes, no solo superó las proyecciones de varios analistas, sino que jalonó el crecimiento del primer trimestre a 1,1%, con el que se pudo romper, después de tres trimestres, la senda de contracción que generó la pandemia.
De igual forma, el mes de marzo, al no haber tenido bloqueos ni fuertes restricciones para contener el virus, evidenció la fuerte capacidad de reacción que tiene el aparato productivo nacional; lo que llevó a pensar que 2021, a pesar de todos los desafíos del plan de vacunación, podía ser un buen año para los negocios a nivel local.
Sin embargo, las estrictas medidas de abril para contener la tercera ola de contagios y el desenlace de las manifestaciones sociales cambiaron rápidamente el panorama. El comercio, en particular, al ser uno de los renglones económicos más afectados, pasó de un naciente optimismo a un escenario de pausa incierta.
De acuerdo con un reciente balance que presentó Fenalco, en menos de un mes de paro, las pérdidas del sector del comercio formalizado superaron los $3 billones; se cerraron cerca de 40.000 empresas, de manera temporal o definitiva, y 300.000 personas se quedaron sin empleo. Esto sin contar los daños colaterales que generan las penalidades por incumplimiento de contratos, los sobrecostos logísticos, las cancelaciones de acuerdos comerciales y la ralentización de planes de inversión.
Con todo y esto, pese a la crudeza de los datos, vale la pena señalar que el golpe al comercio va más allá de los números brutos. Por encima de los indicadores de ventas, los balances financieros o el precio del dólar, los que están detrás de un estante saben que hay algo más importante: la confianza, que, aunque inmaterial, constituye el motor de los negocios y ha sido la fuente de resiliencia del sector en medio de la presente pandemia.
En ese sentido, 25,6% registrado por Fedesarrollo en el Índice de Confianza Comercial (Icco) para abril, que devuelve la medición a los niveles de octubre y noviembre del año pasado, constituye una clara muestra de la magnitud del impacto que está teniendo la coyuntura y da una idea de cómo podría seguir bajando este indicador para mayo.
En palabras de Luis Fernando Mejía, director de dicho centro de pensamiento, “no debería sorprendernos que en el resultado que tengamos para el mes de mayo continúe o, incluso, se profundice la caída de la confianza empresarial”. La intensidad y la naturaleza permanente de los bloqueos durante el quinto mes del año, más allá de las vulneraciones a los bienes materiales y la parálisis a la operación de las empresas, ha afectado ese elemento intangible que determina todo lo que sí es cuantitativo.
Con esto en mente, el foco debe estar en devolverle la confianza a los comerciantes, para así retornar a la dinámica de marzo y recuperar la productividad de los últimos dos meses. La disposición del Gobierno por impulsar en junio una reapertura acelerada es un buen inicio. Por lo pronto, una cultura de diálogo y de respeto por lo ajeno son mínimos para que el ecosistema comercial pueda volver a operar.
El comercio no son solo ventas y números; son empleos, oportunidades y bienestar. Alcanzar un crecimiento económico a niveles de antes de la pandemia es tarea de todos, la confianza es tarea de todos.
Bogotá y Cali han sido las de mayores pérdidas. En la capital cerca de $500.000 millones al día se genera en pérdidas para el comercio
La oficina del Alto Comisionado para la Paz afirmó que los puntos deben ser refrendados por las partes y analizar los desacuerdos
Los reportes muestran que más de 76% de las empresas manifestaron afectación en la producción, y 91,4% percibieron menores ventas como consecuencia de los primeros 30 días de paro