‘Darle la cara al río’ costará $1 billón

Con un resumen histórico de la importancia de Barranquilla para el desarrollo de la región y el país inició su intervención Carlos Acosta, gerente de desarrollo de la ciudad. Luego explicó los avances logrados en los últimos años como la materialización de una parte del Malecón, el cual a sus 50 días de inaugurado ha tenido 250.000 visitantes.

En este sentido, Acosta explicó que la idea de la Alcaldía actual, a la cabeza de Alejandro Char, tiene como meta “darle la cara al río, que por tanto años le hemos dado la espalda”. Para esto, además del Malecón tienen planeado la construcción de cable por el río, una acuario y un centro cultural. Estos proyectos, dijo el gerente, son sueños que pueden lograrse así como se han logrado materializar el resto de obras.

Adicional a estos, la administración está haciendo inversiones importantes en el sector para estimular el desarrollo. El primero fue la inauguración del centro de eventos Puerta de Oro, el cual tuvo un costo de $270.000 millones. El gasto en la construcción del Gran Malecón será de $360.000 millones. El edificio nuevo de la Alcaldía y el proyecto de La Loma tendrán un valor por $130.000 millones. La ampliación de la Vía 40 será de $140.000 millones y en el Parque Batallón se invertirán $100.000 millones. En total serán invertidos $1 billón para que la ciudad de la cara al Magdalena.

Por otra parte, el gerente dio la cifra de 110 parques entregados, los cuales fueron intervenidos para mejorar los espacios verdes a la ciudadanía. Hacen falta por entregar otros 80.
“La meta de la Alcaldía es hacer a la ciudad atractiva de nuevo. Que pueda ofrecer todo lo que una ciudad desarrollada tiene, espacios verdes y culturales, infraestructura vial, seguridad para sus habitantes y visitantes, educación, recreación. Recuperaremos espacio público para un total de 1,5 millones de metros cuadrados”, detalló Acosta.
En materia de vivienda, en el sector se tiene planeado la construcción de 70.000 casas para estratos 4,5 y 6, como también casas de interés social.
Todas las obras, proyectos planeados y ejecución de los mismos pueden tardar hasta 20 años, pero Acosta afirmó que tienen planeado reducir este tiempo a 15 años. Por lo que tiene que ser “un plan estratégico de desarrollo bien ejecutado”.