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Se resalta el compromiso de las cooperativas colombianas con la protección al medio ambiente, la promoción de la justicia social, la generación del empleo digno y fomentar el consumo sostenible
Confecoop reporta que hay más de 3.100 cooperativas y que de cada 1.000 ciudadanos, alrededor de 124 están vinculados
Las cooperativas en Colombia datan de 1.920, año en que nacieron las primeras asociaciones de este tipo. Luego, en 1.931, el Gobierno Nacional promulgó la primera ley que definía las asociaciones cooperativas. Desde entonces, luego de varías décadas y nuevos actos legislativos, el país cuenta con más de 3.104 cooperativas, según datos de uno de los más recientes informes de la Confederación de Cooperativas de Colombia (Confecoop) .
En el documento se puede ver que alrededor de 13% de la población pertenece a alguna cooperativa: en Colombia se cuentan 6,3 millones de integrantes, cifra que tiene un impacto directo en 38% de la población, es decir, unos 19 millones de ciudadanos del país. Lo anterior significa que de cada 1.000 habitantes, 124 pertenecen a una asociación de este tipo.
Por género, aproximadamente 3,12 millones del total de miembros (49%) son mujeres, mientras que 3,17 millones son hombres (50%).
Asimismo, Confecoop ha contabilizado al menos 63.515 de asociados que son personas jurídicas. Entre los datos se destaca que las cooperativas generan hasta 121.000 puestos de trabajo. Geográficamente, de las 3.104 cooperativas, 2.300 (74%) están domiciliadas en 20 ciudades capitales del país: el restante está en 477 municipios.
“La tendencia más urbana que rural de las cooperativas sirve de referencia para promover una política de ampliación de su presencia en zonas rurales y pequeños municipios”, asegura Confecoop.
El informe del gremio arrojó también que este sistema cuenta con activos por más de $52 billones, de los cuales $26 billones son de cartera de créditos colocada y cuyos ingresos anuales alcanzan $31,2 billones. El patrimonio colectivo se contabiliza en $19,1 billones.
¿Cómo funcionan?
La Cámara de Comercio de Bogotá (CCB) define a las cooperativas como una empresa asociativa sin ánimo de lucro en la que se busca que los usuarios sean, simultáneamente, aportantes y gestores de la organización.
Wilson Triana, experto y consultor en banca y seguros, las define como “sociedades que se constituyen bajo la modalidad cooperativa, cuyo objeto social principal es la asociación de personas con intereses específicos comunes y con ofertas de beneficios obtenidos a través de diferentes actividades. El único fin es satisfacer las necesidades de sus asociados”.
Jairo Ramírez, gerente de Fincomercio, explicó que en las cooperativas las personas pueden vincularse de manera voluntaria y convertirse en asociados. “Los miembros hacen un aporte mensual y acceden a un portafolio de productos, servicios y beneficios, además de participar en la toma de decisiones”, aseguró. Las principales actividades económicas relacionadas con las cooperativas son las financieras y crediticias; también incluyen los rubros de comercio y consumo, así como el sector agropecuario e industria de alimentos. Así como el transporte y las comunicaciones que también tienen cabida.
Ramírez añadió que el modelo cooperativista es flexible y puede adaptarse a diferentes sectores de la economía. “Necesita de la unión de personas dispuestas a colaborar y trabajar juntas por el bienestar y la transformación y calidad de la vida de los integrantes”, dijo. De esta manera, otros sectores como agricultura, vivienda y educación también están cubiertos por el modelo.
Sobre el portafolio de servicios y beneficios, el directivo comentó que las cooperativas ofrecen un abanico amplio y diverso. Todo parte del convenio de los integrantes y los intereses. Entre las opciones están los auxilios en salud, educación, recreación, coberturas en seguros, accesos a líneas de crédito, planes de ahorro e inversiones.
Triana, por otro lado, afirmó que las cooperativas ofrecen operaciones de crédito en varias modalidades, incluyendo crédito hipotecario, cuentas de ahorro con diferentes ofertas, además de inversiones en certificados de depósito a término. También hay adquisición de seguros, beneficios educativos, exequias y protección para el asociado y su grupo familiar por imprevistos en salud.
El sector se está fortaleciendo
El cooperativismo en Colombia está buscando mayor robustez y por ello, según indicó Ramírez, en el Congreso cursa un proyecto de ley que ya superó el primer debate; su fin es actualizar la ley de cooperativas (Ley 79 de 1988), con el objetivo de modernizar el modelo y ofrecer más herramientas que fortalezcan a las asociaciones.
“Las familias deben conocer el abanico de beneficios y bondades que ofrece el sector cooperativo. Además, observamos un mayor acercamiento con las autoridades y hay un mayor entendimiento de la naturaleza del sector cooperativo. Esperamos concretar estos apoyos, como la aprobación de líneas de redescuento que fortalezcan las fuentes de recursos para el manejo de la coyuntura económica del país”, añadió Ramírez.
Confecoop asegura que la importancia de las cooperativas radica en varias aristas. Destacan que este tipo de asociaciones democratizan la propiedad, además de generar condiciones que favorecen la igualdad de oportunidades.
El gremio asegura, igualmente, que el modelo promueve la inclusión social, económica y financiera, además de impulsar el sector agroindustrial y contribuir a la reactivación económica.
Colanta, que es una de las cooperativas enfocadas en el sector agro del país más grandes, tiene más de 11.000 asociados al día de hoy
A partir de esta ley se introducirán cambios en el esquema de supervisión para impulsar el desarrollo de una economía cooperativa
El presidente ejecutivo de Confecoop, Carlos Acero, indicó que el apoyo a la economía popular puede ayudar a mitigar el gota a gota