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Las empresas de minería y metales se enfrentan a una variedad cada vez mayor de desafíos, desde mercados volátiles y una competencia más dura hasta el cumplimiento normativo y la descarbonización.
El rebote del PIB minero durante 2021 fue de 8,2%. la extracción de carbón, por su parte, tuvo un crecimiento de 63,1% durante este lapso y representó 56,1% del PIB de ese sector
La industria nacional ha venido en un proceso de recuperación tras el impacto de la pandemia. De acuerdo con el Dane, la economía rebotó a una tasa de 10,6% durante 2021, un crecimiento real de 2,8% sobre la cifra de la prepandemia. El primer año del covid-19, este impactó fuertemente a la industria de minas y canteras. Por ejemplo, durante el segundo trimestre de 2020, el PIB del sector cayó 21,4% y desde entonces ha venido en un lento proceso de recuperación.
Durante 2021, su contribución al valor agregado fue de 0,4% en su serie original frente al año anterior, con un crecimiento de 8,2%. En parte, ese comportamiento se explicó por un crecimiento anual de 63,1% en la extracción de carbón de piedra y lignito, cuya contribución al PIB minero alcanzó 56,1% y al dato nacional significo 0,74%.
Sebastián Martínez, director económico de la Asociación Colombiana de Minería, aseguró que este fenómeno se explica por el efecto base, ya que en 2020 se vieron las cifras más bajas de producción de este mineral.
“Este crecimiento se traduce en un aumento de 14% en las regalías mineras que entrega este sector al país, con montos que superan los $1,9 billones”, señaló Juan Camilo Nariño, presidente de la Asociación.
Esta recuperación se vio reflejada también en las exportaciones, que durante 2021 totalizaron US$5.653 millones, cifra muy cercana a la de 2019, cuando fue de US$5.664 millones, de acuerdo con el Dane.
Esta recuperación del sector se va a ver impulsada también por los buenos precios del commodity, cuyo valor ha alcanzado cifras superiores a US$400 por tonelada en medio de la crisis generada por la invasión rusa a Ucrania. Con esto, la producción del mineral podría verse incrementada durante el año, como lo estima la ACM.
Carlos Andrés Cante, presidente de Fenalcarbon, señala que ya había unas inversiones para las operaciones mineras que eran necesarias. “Con el panorama actual surge una gran cantidad de inversiones en pequeña y mediana minería que permiten ampliar operaciones en el centro del país. También vemos inversiones mayores por el inicio de operaciones del titulo minero de Carbones de Córdoba, que son de respaldo para el consumo nacional”, destaca el dirigente gremial.
En medio del panorama actual de altos precios y una mayor demanda, se espera que la actividad minera y en especial del carbón se recupere y crezca. Esto impactará las finanzas por medio de su aporte al PIB, así como mayores ingresos fiscales derivados de las regalías y el impuesto de renta.
Gracias a las mejores exportaciones esperadas, los expertos gremiales también esperan que las inversiones sigan creciendo.
Advierten posible escasez
Asoenergía, agremiación que reúne a los grandes consumidores de energía industriales, solicitó al ministro de Minas y Energía, Diego Mesa, tomar medidas que permitan el abastecimiento de carbón para las grandes industrias del país y el sector térmico. Esto, con el fin de evitar un desabastecimiento y, por ende, un mayor alza de precios de la generación de energía. El alto precio del commodity podrá tener un efecto en tarifas de energía así como la confiabilidad del sistema.
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Aun así se benefician las cuentas externas del país, la caja del Gobierno y las comunidades que reciben regalías por la explotación de este producto.