Eafit democratiza el acceso a inteligencia artificial para amplificar impacto educativo

Que la inteligencia artificial (IA) esté al alcance de todos sus estudiantes y que sea una alianza en la transformación educativa que la institución propone es el objetivo con el cual la Universidad Eafit ha abrazado esta herramienta y la ha incorporado en sus diferentes ámbitos de aprendizaje para amplificar su impacto en la sociedad.

La alianza establecida recientemente con Microsoft, en conjunto con otras instituciones de educación superior como la EIA y el CES, para la creación de un Laboratorio de Inteligencia Artificial, es solo una muestra de los avances que Eafit ha alcanzado en este propósito.

José Alejandro Betancur, director del Nodo, el centro de formación en nuevas tecnologías de la universidad, afirmó que la democratización de la IA en Eafit va desde la oferta de cursos, programas, diplomados e incluso una especialización enfocada en estas herramientas, hasta la incorporación de estas en las aulas y los ambientes de aprendizaje para potenciar la formación de los estudiantes.

Un formato de aprendizaje

Con la alianza con Microsoft, Eafit ha elegido el formato de nodo, que consiste en aprender haciendo mediante retos en distintos escenarios y sectores productivos, desde las grandes compañías hasta las pequeñas y medianas empresas que quizás, con menos recursos, puedan sacarle provecho a la IA para aumentar sus niveles de eficiencia y productividad.

“En el Laboratorio de IA, a nivel de formación, trabajamos con varios aliados en educación para entender cómo se puede fortalecer la labor de los docentes para generar un impacto mayor en los estudiantes”, agregó Betancur.

Una de las premisas que tiene la universidad es la de derribar algunos mitos que se han formado alrededor de la IA y demostrarles a las empresas que estas herramientas están a su servicio y no en su contra.

La idea es que las empresas aprendan a utilizar estas herramientas, en especial en aquellos aspectos que son susceptibles de automatizar, y que en vez de pensar en que estas van a eliminar puestos de trabajo, les van a ayudar a complementar sus tareas y ser más productivos.

“Estamos trabajando en dos vías: por un lado, les enseñamos a automatizar mediante la IA y, por el otro, a potenciar las capacidades humanas y, con conceptos como mínimos empleados viables y aceleración del conocimiento, las ayudamos a encontrar el talento que necesitan y a formarlo de acuerdo con lo que le falta para poder ser empleable”, indicó Betancur.

Un punto clave es que la universidad no solo está en contacto con el sector productivo, sino que está dialogando con el sector educativo, en específico los colegios, para identificar aquellos estudiantes que tienen intereses en la IA y poder orientarlos en sus vocaciones para que cuando lleguen a la institución ya tengan las bases necesarias para adoptar estas herramientas en sus capacidades.

Eafit piensa en el presente con una visión de futuro en la que la IA tiene un lugar preponderante en sus proyecciones y desafíos para preparar a las nuevas generaciones y que ayuden a superar los retos que el contexto proponga.