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Empresas sufren por locales destruidos y saqueos
Un emprendimiento de jóvenes barranquilleros, El Caminante, tuvo que cerrar sus puertas el 29 de junio del año pasado
Un emprendimiento de jóvenes barranquilleros, El Caminante, tuvo que cerrar sus puertas el 29 de junio del año pasado. Su concepto giraba en torno al café, y a generar una cultura sobre este en la ciudad.
Andrés Vergara, apasionado por el producto, decidió materializar su sueño y junto a un amigo de su infancia fundó esta tienda de café en 2017, con una inversión estimada en $300 millones.
“Fueron dos meses duros. Nos dimos cuenta de que no dominábamos el modelo de domicilios y tampoco estábamos en el top of mind de la gente. Ahí confirmé que mi negocio es brindar la experiencia”, indicó Vergara.
Tras haber reportado pérdidas económicas aproximadas en $10 millones mensuales durante los 60 días más álgidos de la pandemia, Vergara tomó la decisión de cerrar.
A pesar de haber intentado mantenerse a flote con la modalidad de domicilios, la compleja situación económica de muchos hogares en la ciudad, así como la ardua competencia, no permitieron que el negocio se mantuviera a flote, y las esperanzas de volver al ruedo empresarial se quedaron cortas ante la difícil situación social.
Entre los afectados los sectores del agro y productos cárnicos son los que habían mostrado la mayor afectación en sus operaciones
La central de abastos de la capital del Atlántico reportó un aumento en el precio de los alimentos de hasta 50% por los bloqueos
José Miguel Vargas, gerente de la compañía, comentó que se ha presentado una subida en los precios de los insumos para sus locales