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Las actividades comerciales, industriales y de servicios en este departamento dan muestra de su dinamismo económico
Ana Karina García, directora de la Fundación Juntos se Puede, destacó que se promovió 20 mesas de diálogo en la frontera
Promocionar la frontera como un espacio binacional de encuentro y aprovechamiento económico fue el principal objetivo de la fundación Juntos Se Puede, una entidad respaldada por la ONG Hanns Seidel Stiftung y que dirige Ana Karina García.
Durante cuatro meses, esta fundación realizó una actividad a la que llamaron el proyecto “Una Sola Frontera”, con el propósito de garantizar un espacio de diálogo social entre diversos actores de Norte de Santander (Colombia) y Táchira (Venezuela).
“Es crucial destacar que estos espacios de diálogo son fundamentales, ya que permiten a los participantes expresar libremente sus preocupaciones y compartir las dificultades que enfrentan en sus respectivos sectores y gremios. Al permitirles explicar su propio contexto, se logra una comprensión más completa de los desafíos que enfrenta la población fronteriza, sentando las bases para un avance y desarrollo significativos”, explicó García.
Durante cuatro meses se realizaron 20 mesas de diálogo, en las que participaron: políticos, jóvenes, organizaciones sociales, académicos y empresarios. Entre los temas tratados destacan: oportunidades de educación, relación comercial, falta de control migratorio, inseguridad en paso fronterizo, xenofobia, entre otros temas.
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