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Las reuniones de Sura se dieron en medio de un ambiente tenso, que contó con la presencia del Esmad, pero también con llamados al diálogo entre el GEA y el Grupo Gilinski
Ni siquiera en las empresas en donde las altas directivas tienen las relaciones más tensas con sus accionistas, o incluso con los sindicatos, es común ver al Esmad de la Policía Nacional asistiendo a las asambleas anuales. Esa fue una de las fotografías que dejó la maratónica sesión de reuniones que realizó el Grupo Sura ayer y que marcó un nuevo episodio en las tensiones con la familia Gilinski.
El ambiente tenso que se vivió durante el día inició desde las 7:55 a.m. cuando no hubo el quórum suficiente para participar en la reunión que habían convocado las empresas del banquero caleño para cambiar la Junta Directiva de Sura.
Para eso, se propusieron cinco planchas. Dos de ellas fueron propuestas por las empresas de los Gilinski y en donde estaban María Ximena Lombana, Oliverio Lew y Eloy Alfaro como miembros independientes.
En otra se propuso a Gabriel Gilinski, Ángela Tafur, José Luis Suárez y Ricardo Díaz como miembros patrimoniales, mientras que en otra la Junta harían un cambio entre Jaime Gilinski y el mencionado Díaz. Las tres planchas restantes fueron presentadas por Jats Inversiones, Olomega SAS y Juan Pulgarín, quienes nominaron a David Yanovich, Jaime Velásquez, Guillermo Lema y Mauricio Ortega (patrimoniales); y Guillermo Villegas, Jaime Arrubla y Lina Echeverri (independientes).
A pesar de que hubo rumores de que se dio un acuerdo previo entre ambas partes para no asistir a esta reunión, tanto Grupo Argos como Grupo Nutresa publicaron una información relevante en la que aseguraron que no se había llegado a ningún acuerdo, ni había habido ninguna reunión previa en donde hubieran decidido no asistir a esa hora.
“No existe en este momento ningún proceso de negociación respecto a las participaciones accionarias que la compañía tiene en Grupo Sura S.A. o en Grupo Nutresa S.A”, dice el comunicado que publicó Grupo Argos.
Como finalmente no se realizó la primera reunión, la Junta Directiva quedó conformada tal como venía y fue quien lideró las citaciones que se realizaron después y en las que se superaron los eventuales conflictos de interés que había para participar en las decisiones de Grupo Nutresa.
A pesar de que el ambiente en Plaza Mayor no fue el más cordial, los mensajes finales apuntaron hacia la unidad. “Hago un llamado a tratar de evitar los conflictos (...) Confié en Colombia cuando invertí en Grupo Sura y creo firmemente en el Grupo, es una gran empresa y tenemos que buscar la manera para generar valor a los accionistas”, dijo Jaime Gilinski, en las intervenciones finales de la Asamblea.
Con un tono similar habló el presidente de la compañía, quien le dijo a LR que hay que buscar “puntos de acuerdo” e hizo un llamado a la calma respetando la diversidad y la diferencia. “Hay que mantener no solo la calma, sino mantener siempre la búsqueda de puntos de acuerdo”, dijo.
En medio de la tensión que hubo en la reunión, llamó la atención una sorpresiva participación del expresidente de Bancolombia, Carlos Raúl Yepes, quien aseguró que esta semana compró una acción para participar en la Asamblea. “No soy mandadero ni nadie me ha enviado y veo lo que está pasando y me dio mucha tristeza y quiero simplemente expresar mi tristeza por esta pesadilla”, dijo en su intervención. Expresó que “esta guerra hay que pararla, así no se pueden hacer negocios”.
Yepes le dijo Jaime Gilinski que “todas las guerras son dolorosas, largas y costosas, y si nuestra guerra se terminó después de 12 años con un acuerdo, con una transacción, podemos ahorrarnos todo esto”, haciendo referencia a la vieja batalla entre el GEA y la familia Gilinski por el entonces Banco de Colombia.
Las discusiones entre ambos grupos se dio en un día marcado por una maratónica sesión de asambleas, en donde se resolvieron los ya mencionados conflictos de interés y se tomaron otras decisiones.
Al agotar el orden del día, la Junta aprobó a la Asamblea a que también se autorizara y ratificara la votación sobre esos conflictos de interés a los representantes legales de IC Estratégicas, una filial del Grupo Sura, para la votación en la asambleas de Grupo Argos y Grupo Nutresa.
Durante la Asamblea Ordinaria, se aprobó la propuesta de readquisición de acciones por $300.000 millones. Además, se dio el aval para el pago de un dividendo ordinario por $1.280 por acción, pagadero en cuatro cuotas.
El plan para Nutresa incluye invertir en nuevas plantas y expandir las marcas a mercados emergentes como India, Pakistán y Bangladesh, además de llegar a cotizar las acciones en Abu Dhabi
El político destacó que las acciones del grupo se han devaluado y para generar un cambio será necesario aceptar un nuevo jugador
Jaime Gilinski solicitó una auditoría externa tras evidenciar la existencia de tres contratos con Grupo Bolívar, Munich RE y Cdpq