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Si el empresario caleño consigue su objetivo en dicho emisor, también entraría a tener una injerencia parcial en Argos y Bancolombia
Hoy se llevará a cabo la asamblea ordinaria de accionistas del Grupo Sura en la Plaza Mayor de Medellín desde las 10:00 a.m. Este será el segundo encuentro oficial entre el Grupo Gilinski y el Grupo Empresarial Antioqueño (GEA) luego de la pasada reunión entre los socios del Grupo Nutresa, compañía de la cual posee 30,7% y en donde consiguió dos puestos en la Junta Directiva.
En esta ocasión, Jaime Gilinski prevé quedarse con dos sillas en el órgano directivo, aunque baraja una tercera posición si se tiene en cuenta que tiene el control de 31,5% de la compañía de seguros e inversiones. De conseguir entrar a la junta de la forma en que lo espera, el caleño tendría una injerencia parcial en Bancolombia y Grupo Argos.
Según un informe especial de renta variable elaborado por Corficolombiana, la estructura de enroque accionario del grupo se evidencia con el cálculo de las participaciones cruzadas, donde el porcentaje sobre una empresa en particular implica la posibilidad de obtener recursos externos sin perder el control.
Si bien dicho análisis toma como condicional el hecho de que el nuevo miembro del grupo paisa logre una posición por encima de la que tienen los otros integrantes del otrora Sindicato Antioqueño, se prevé que lo sucedido en la multilatina de alimentos se replique, e incluso el panorama mejore para el inversionista.
En total, el empresario lograría un miembro patrimonial y entre uno o dos miembros independientes. Incluso, sin requerir de OPA adicionales, este resultado llevaría a un cambio en las mayorías de las juntas de Grupo Argos y Bancolombia de forma simultánea.
Para Andrés Duarte, director de Renta Variable para Corficolombiana, “lo que está haciendo es pretender entrar a tener participaciones accionarias y puestos en las juntas directivas, pero a través de Nutresa y Sura. Si no lo logra, se vería obligado a hacer una OPA adicional por ambas compañías directamente. El tema sigue en movimiento”.
Así lo ratificó el mismo Jaime Gilinski en entrevista con LR. A la pregunta de si tenía planes de buscar sillas en las juntas directivas de dichas empresas, contestó de forma positiva y agregó: “creo que podemos contribuir a generar valor en esas compañías”. No en vano, semanas atrás, él y su hijo, Gabriel Gilinski renunciaron a la Junta Directiva del banco GNB Sudameris.
Sin embargo, los planes podrían truncarse si toman fuerza los conflictos de interés.
El GEA busca reelegir la actual Junta Directiva, compuesta por Jorge Mario Velásquez, presidente del Grupo Argos; Carlos Ignacio Gallego, presidente del Grupo Nutresa, y Alejandro Piedrahíta Botero, vicepresidente de Finanzas Corporativas del Grupo Argos. Sumados a Jaime Bermúdez Merizalde y María Carolina Uribe Arango, como independientes.
En contraste, la propuesta de Gilinski contempla como opciones para la elección a Jaime Gilinski, Gabriel Gilinski y Ricardo Díaz Romero como patrimoniales, mientras que como independientes propone a José Luis Suárez Parra, Christian Murrle, Ángela María Tafur y Ricardo Fandiño de la Calle.
Frente a estos últimos nombres, el Comité de Nombramientos y Retribuciones de Sura emitió conclusiones que rechazan de facto la participación de todos los propuestos por el nuevo accionista.
De Angela María Tafur, directora del Banco GNB Sudameris en Panamá, y José Luis Suárez, miembro suplente en la Junta Directiva del Banco J.P. Morgan Colombia S.A. señalan que el conflicto puede superarse si estos candidatos renuncian a los cargos mencionados.
Ricardo Díaz Romero y Eloy Alfaro también son nombrados en el documento debido a que, actualmente, conforman la Junta Directiva del Banco GNB Sudameris.
Así mismo, en este estudio se contempla la imposibilidad de que Jaime Gilinski llegue como miembro patrimonial, toda vez que, pese a haber renunciado a la junta de GNB Sudameris, es el principal controlante del holding financiero, siendo competencia directa para Sura y Bancolombia.
“La anterior incompatibilidad podría superarse si la asamblea general de accionistas lo autoriza, concediendo una excepción a la política aprobada por ella misma y considerando aspectos como el equilibrio del principio de representación proporcional”, se lee en el documento.
El mismo reporte dice que, de darse luz verde a este cambio, se implementarán protocolos que permitan proteger la confidencialidad de la información y evitar que se presenten prácticas restrictivas de la competencia.
Respecto a Gabriel Gilinski, el estudio argumenta que su relación de parentesco en primer grado de consanguinidad con Jaime Gilinski es un aliciente suficiente para considerar inapropiado que participe del órgano rector de esta empresa.
Diego Palencia, vicepresidente de Investigaciones y Estrategia de Solidus Capital Banca de Inversión, aseguró que “al entrar en el juego de elección de Junta Directiva, yo creo que Gilinski hizo el cálculo perfecto para que, llegado el momento consiguiera la cantidad de sillas que pretendía desde el inicio”.
Para el experto, es evidente el conflicto de interés que tiene el nuevo accionista del grupo debido a que su negocio termina siendo competencia directa para Sura y Bancolombia.
“Hoy vamos a ver un proceso protocolario de gobierno corporativo. Muy seguramente Gilinski va a apoderarse de una silla patrimonial y una independiente. Él ya tiene una posición ganada, más allá de que esté en el mismo negocio”, concluyó Palencia.
Adicionalmente, Diego Márquez, especialista en derecho financiero y asociado del bufete Del Hierro Abogados, señaló que estos informes suelen ser meras recomendaciones que al final la asamblea de accionistas decide si acata o no. “Existen reclamos legítimos con base en prácticas de buen gobierno corporativo”.
Discusión de un mayor dividendo prepararía votación para Junta Directiva
Cercanos al Grupo Gilinski han asegurado que la primera propuesta del empresario caleño será el aumento del dividendo a pagar. La idea es subir el retorno de $748 a $1.892 por acción, lo que equivaldría, en números redondos, a cerca de 70% de las utilidades reportadas por dicha compañía ($1,5 billones en 2021). De aprobarse este punto, la posición de los accionistas presentes se tornaría mucho más amigable con Jaime Gilinksi, concluyendo en una votación favorable en términos de puestos de junta.