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Hoy, por primera vez, el Diario La República se imprimió en un papel proveniente de la caña de azúcar, que fue fabricado con bagazo. una apuesta que se suma al uso de tinta fabricada con derivados de la soya
Hoy, por primera vez en su historia, La República imprimió su edición con bagazo de caña en el marco del Día Mundial del Medio Ambiente
En medio de los avances ambientales y sostenibles más significantes en la historia, mañana se conmemora el Día Mundial del Medio Ambiente. En el marco de empresas avanzando hacia la carbono neutralidad y las industrias reduciendo cada vez más sus emisiones, el lema de esta edición será ‘Una sola Tierra’.
Los bosques son uno de los ecosistemas más afectados actualmente. Solo en Colombia, según la Contraloría, al año se deforesta un área semejante a la de ciudades como Bogotá. Esto no solo por la ganadería, que es una de las mayores responsables, sino también para la producción de otros bienes como el papel.
La República, en su edición de fin de semana, decidió apostarle una de las nuevas formas de hacer papel que, en el caso del periódico de hoy, es 100% reciclado y no ha sido procesado con químicos blanqueadores. En el mundo se fabrican anualmente más de 400 millones de toneladas de papel y cartón para impresión, escritura y empaques.
De este, 98% proviene de fuentes maderables y procesos de reciclaje, y solo 2% se produce a partir de fibras alternativas como el bagazo de caña de azúcar, del cual fue hecho este ejemplar, y en el que empresas como Carvajal Pulpa y Papel S.A. representa 0,06% de la producción mundial.
Si bien es cierto que varias de las empresas que se dedican a la producción de papel cuentan con sus propios bosques que destinan para este fin, la pandemia llegó en 2020 a complicar este panorama. Según Sergio Quijano, gerente general de La República, con la caída en la demanda del papel periódico por las restricciones de movilidad y el descenso del consumo, las empresas fabricantes tuvieron que migrar a otros mercados.
“Las empresas canadienses a las que les comprábamos el papel comenzaron a migrar a la producción de cartón y a otros tipos de papel que les fuera más rentable en el peor momento de la pandemia”, aseguró. Como consecuencia de esto, se presentó una escasez de oferta y ahora, al momento de la reactivación, se están comenzando a sentir los resultados.
Al emplear como materia prima un subproducto agroindustrial en la fabricación de papel no se compite por el uso de suelo ni se limita la producción de azúcar o sus derivados. La caña de se considera una fuente renovable en cortos periodos, con ciclos de cultivo de 12 meses aproximadamente.
En los últimos 360 días, el valor de la tonelada del papel incrementó su precio en cerca de 70%, no solo por el problema con la oferta, sino también por el encarecimiento de los suministros que se emplean en su elaboración.
“Para los siguientes años hemos definido, como parte de nuestra estrategia de competitividad y de sostenibilidad, incrementar la participación en el mercado de empaques, respondiendo a las oportunidades y a las nuevas tendencias e intereses de los consumidores”, indicó el CEO de Carvajal Pulpa y Papel, Juan Pablo Molina.
Fue por esta razón, según Quijano, que desde el diario se planteó la necesidad de comenzar a tener alternativas al papel común que se emplea en sus ediciones impresas. “En este momento, uno como medio impreso no puede depender de algo que está escaso, caro y que se está demorando cerca de nueve meses para ser entregado. Esta edición especial tiene la intensión de unirnos y poner nuestro grano de arena para ayudar con el medio ambiente. La idea es que sigamos trabajando por hacer un mundo mas sostenible.”, dijo.
Vale recordar que La República utiliza tintas que son amigables con el medio ambiente al ser a base de soya.
De esta manera, esta edición de LR se une al catálogo Earth Pact de Carvajal Pulpa y Papel, junto a productos de papel que en no cuentan con químicos blanqueadores y cuya producción requiere menos energía.